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Padre, déme U. la penitencia de mis cu-lpas,
y
licencia
para ir
á
r'ecibir á mi Señor Sacramentado', para honra
y
gloria suya y bien de mi alma; y habiendo continua–
do este modo algunas veces consecutivamente al fin de
la. confesion, hice reparo sin manifestárselo,
y
conocien–
domelo la _sierva de Dios, me dijo con rendimiento hu–
milde: no se admire U.; explicándome que en el
p~dir
penitencia, era por hallarse á los pies del Divino Señor y ·
Minist.rosuyo,, qomo lo es el señor Sacerdote, á quien
veneraba y ·respetaba, como rea y penitente:
y
en el pe–
dir licencia para comulgar era por si ·el señor Sacerdo–
te se lo permitía
ó
no, para sujetarse
su
~isposicion.
<c':rres días tn.tes de su muerte, hallándose sus hijas
y
yo presentes, me dijo con bastantes 'sollozos
y
lágrimas:
Mi
Padre y Señor D. Basilio, acuél·dese de mí, y no me
deje mucho tiempo en el purgatorio; que certificado con
toda verdad, que los mas de los días que
egal:f~
á
mis
piés á confesarse, me confundi.a ver
y
oír aquella ¡>eni-
.tencia y humildad con que estapa en el Santo Sacra–
me~lto
de la penitencia, que tanto veneraba, llorando
. amarguísimamente sus pecados, pidiendo á Dios la per–
donase.
«Sie-:1do digno de reparo, que las mas veces llegaba sin
traér materia sobre que recayese la absolucion, si no
la
diera.
con una venial de las pasadas: porque aunque es
verdad que experímenta.ria las mas veces grande ente–
reza, y algun género de fervor en la correccion,
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celo
de los defectos
y
quebrantos de sus súbditas en las obli–
gaciones de su Instituto, era llevada de un santo celo y
fervoroso espíritu que le asistía continuamente, en que–
rer verlas hechas unas santas, en9omendándolas á Dios,
y
ocupandolas en Dios.
((y
para que se confirme mas esta verdad, tocante
á
la
pureza y humildad con que iba, y procedía eri estas
obras de su obligacion, digo: que cuando llegaba á mis
piés á confesarse, procedia diciendo: «Padre mio ·
á-
sus
piés me sujeto: corríjame
y
déme la penitencia que me–
rezco por mi soberbia, que
yo
soy la ruin pecadora: é