XII
nar los milágros que se refieren en la historia que hoy
publicamos. Imajinemos
á
los sábios, contemplando
de
hito en hito
á
la madre Antonia en su lecho de muer-–
te, cuando hé aquí que, en el término de su :tgonía, la
v-en
ponerse
de pié,
abrir lós
br~zos
en cruz
y
expirar~
¿Qué dirá, el mas perspicáz de ellos
y
el ménos estu–
pefacto, al obP.erva.r esa manera
tan
insólita de morir?·
Dirá:- que tomeíl
ese
cadáve:::,
para
que no caiga como
una
piedra., en
virtud
de 1a
ley de la gra,ved:;td !· ;,Y qué
dirú. . él
y
todos, cuando vea11, como lo refieren los
te2-
t¡igos oculares,. que el
cad~ver
se mantiene
de
pié
y
con los brazos abier,tos dtn;ante un e arto de hora?
•
.•)_ .•,.·c. .,
·Dreen1n que sta es una ley
dela . naturalcz~;
i1uc dcs-
,~~t~
;;,-r;·
truwe
la .de
la;
2gra.vedad? ¿Qué
dirír." la
comision cien–
tinca, si hubiese estado en compañia de la múltitud de
per
onas que,
al sangrarla
en
la
fr~nte,
á
los
tltf-S
dias.
de:di-funta, vieron
s::1¡lir
un chorro,
de
agua primero
y
despúes de sangre, durante muchas horas, de ma.nera
que se
empaparon muchos lienzo¡:;? ¿Poddm los
gr~n
des fisiologistas de hoy
y
de ma,ña.rta esplicar científi–
ca1nente semejante
hecho?
¿N
o es esto precisamente
la
antíte,·is
· de cuanto
la
ciencia. enseña? Lo · mismo
se
puede decir del aspecto extnwrdinario t11ne presentan
hoy los 'J.·estos de la
mad1~e
Antonia,
y
que; d·espues de
160 :tilos, parece que fueian de un cadáver de dos
ó
tres
años. (1)
Lo que se deduce de
aqaí
eB,
que
los 1ncréclu1os,
por
110
decln.rar francamente
que
110 les COllYÍene creer·
en' ningun milagro, establecen condiciones
1)l1l"1
creer–
los,
·que
no ha.cen sino rid.iculizárlos,
y'
cm-:,ñdo no
ti
e-·
nen
que
responder
, siemp're les queda la curiosa evu.Riva
de
tm
quien sabe,
pa.ráponer en duda hlechos cuya ver–
dad está comprob
ada por testigos irrecusables . No fa.l–
t an tampoco
quienes dicen que
no
cre'en en
los
milá–
gros porque no hari visto ninguno; pero
igu~.l
derecho
1
V:éase en el Apéndice el
te~ti~ onio
de los médic:Js que hn.n.
re(lonoCido los'restos en 1855
y
en
186·9~
·
··
.