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'En general.
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s
9
Las
Nacion.esvecinas
y
cat6licas dieron grandes ala–
banzas á estas dos determinaciones de
S.
M. expedidas en
1
8
de
Enero de
1
7
6
2 ,
como se puede leer en
el
famoso tratado de
Justino
Febronio,
en que están puestas las regaifas del Soberano
y la autoridad de los Obispos en su debido lugar cori testimo–
nios
irr~fragables
de antigüedad eclesiástica. ¡Ojalá que los que
rodean al R. Obispo acudiesen á los PP., á consultar los Conci–
lios y las Leyes, ámes de arrojarse á tocar unas materias muy su–
periores á su instruccion y conocimiento!
1
r6o
Es de la gloria de
S. M.
el
haber mandado recoger la
Real Pragmática para explicarla segun sus Reales intenciones; pe–
ro tambien se halla empeñado el decoro
y
reputacion del Go–
bierno en declarar los límites de estas regalías, hacerlas obser–
var con vigor,
y
restablecer la Pragmática
y
Cédula, hechas las
convenientes declaraciones.
1
r
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r
A
causa de esta suspension se experimentan graves
perjuicios
é
inconvenientes, como
el
de haberse atrevido un Clé–
rigo Mallorquín en fines del año pasado de
r
7
66,
en fuerza de
despachos de la Curia Romana , á poner por excomulgado
al
R. Obispo de Mallorca, Prelado de tantas prendas
~inud
y
le–
tras; fixándose en Menorca los cedulones con escándalo mengua
y oprobio de nuestro Gobierno, como resulta de los autos que
penden en el Consejo,
y
están en poder de los Fiscales.
V
ea aho–
ra
el
Obispo de Cuenca si la regalía del
exequatur
es necesaria,
para conservar
á
los Obispos mismos en
d
libre uso de sus fun–
cion~s
pastorales y
~
cada uno en sus límites.
r
1
6
2
No contento el Obispo de Cuenca con inspirar en
sus Cartas especies tan sediciosas contra el Gobierno en las ma–
terias
eclesiástica~
, capaces de inducir á rebelion los Pueblos,
vuelve á sus f:worÍtas especies de Escusado
y
Novales, atribu–
yendo
á
ellas la escasez de granos, que con mas pureza y verdad
podria achacar
á
la deterioracion de la agricultura por las muchas
tierras, que las Comunidades y manos-muertas hán reducido á
dehesas.
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3
Dice, como si estubiera inspirado , que de aí dima–
n6la perdida de la Habana; constando al universo el proceso
instruido contra los que no la defendieron bien , como era de su
_obligacion; exponiéndose hasta elt1lrimo trance por la Pacria.
1
r
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4
Habla de la pérdida de la Esquadra sin obrar,
y
di–
simula hallarse complicados en
el
mismo proceso sus Gefes, y la
omision de no habérseles pasado las órdenes
Ó
noticias, para
in–
cor-