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jamás puede apartarse de dos principios en sus Representaciones,
que son la indubitable
certeza
de los hechos sobre que las forma,
y
la
compétencia
eón su
~inisterio,
por no turbar los agcnos.
~
·
9
7
1
Recuerda en'la Carta al P. Confesor de
1
5
de Abril
~us
pronosticas
ya empezados á cumplir, segun dice, aludiendo
al
parecer
á
los tumultos pasados ; y por la verdad que esta
es–
pecie de pron6sticos con la circunstancia de aprobar las ponde–
radas quejas de los que pudieron influir en tan
e~traños
desaca–
tos , no es una · recomendacion , para alegada con la confianza
que lo hace este Prelado ; ni los vaticinios de ·tumultos se hán
'reputado hasta ahora entre las acciones heroicas de los Santos.
9
7
:z.
Lo que expone en la _misma Carta sobre la
conduceion
'fdel
trigo
de S. Clemente,
está diminuto , y alterado, como se
'dirá en su lugar,
'y
se hace una grave injuria á S. M, que á
Consulta de su Consejo , y con vista de lo que expuso
el
Fiscal,
remedi6 todos estos des6rdenes ; no ·solo con la Real Pragmáti–
·ca de
1 1
de Julio de
1
7
6
5 ,
sin6 cambien con la Provision acor–
dada
de
3o de Octubre del mismo año, que les puso término final.
·
97
3
El Consejo entre otras noticias pidi6 informe al R.
Obispo de Cuenca , por'lue los Pueblos de aquella Di6cesis
er~n
de los mas afligidos con las conduccioFles forzadas, que se ha–
d an en virtud de 6rdenes del Marques de Squilace·y del Comi–
sionado de S. Clemente D. Juan de Piña.
-
9
74
Es cierto que en esto hubo excesos ; pero cambien lo
es que
S. M.
los remedi6 radicalmente en fuerza de las Consultas
!del
Consejo citadas , luego que su Real ánimo se instruy6 .de
las quejas : de modo que desde Ocrubre de
17
6
5 ,
cinco meses
ánres de los tumultos pasados , habian cesado ya ; sin embargo
·¿e la dificultad que cost6 su remedio por la preocupacion de los
sue habían inspirado las 6rdenes.
1
'
• '
•
,·
97 S
Diga enhorabuena que aquellos abusaron de la con.–
lianza , y que hicieron extorsiones ;
¿
pero como inculca en esto
al
P. Confesor de S. M. ni al Soberano,
á
quien pone
el
Obis..
po en paralelo con el
impio
~Y
Ac!Jab
,
quando las resoluciones
eKistentes en
el
Archivo del Consejo, muy anteriores á los bu..
llicios, como vá dicho, demuestran qué la delicada conciencia de
S. M.
aptnas supo
el
des6rden, quando puso el remedio; siguien-f
'do
el
unánime dictámen de su Consejo-pleno ; cuyas providen•
das serán un perpetuo monumento de la alta penetracion
de
S.
M~
9
7
6
Luego no estaba imbuido su Real ánimo por
el
Con..¡
fesor en especies opuestas al beneficio de los
Pueblos~
ni
nega-.
Oo
1.
do
Prondsticos Jel
~Obispo.
Conduccion
Je
trigo de S. Cle–
mente.
N OTA .
Lo propone el R.
Obispo
f.
r
5 B.
nn.
52
y
53·
Para su
prueba
bá
remitido
un Testimonio que
se halla
f.
77 ,
n.
304 á 310.
r
á
instancia de
los Srs. Fiscales
se
hán traído los do–
cumentos que
se
leen
fs.
76
B, 78 B,
hastae/83
B,n.301
á 3° 3Y3 II á336.
E l
Sr.
.Moíuno
satisface
n.
776
á
79_0._