137
.8
69
Despues pasa
el
R. Obispo
á
quejarse de que en las Ga–
cetas y Mercurios se hán impreso proposiciones capciosas, equf–
vocas, escandalosas, y depresivas de la autoridad Pontificia y
Eclesiástica, dis-imuladas con máximas contr.arias á la Religion
y
á
el
Estado , con noticias en parte falsas y temerarias; y que
aun~
que
se
há prohibido por la Inquisicion uno de estos Mercurios,
corren libremente otros, y algunos papeles públicos , que con–
tienen noticias de mucho escándalo, y tratamientos injuriosos
á
el
Instituto de la Compañi"a, y poco favorables á otras Religiones.
8
70
Propone, que aunque haya muchos Eclesiást-icos que
mas sirven de ruina que de.edificacion ·,depende mas que de su
número y riquezas de la fragilidad humana; y-que
el
modo de
reprimir los abusos y renovar la disciplina es celebrar Sinodos
Dioc~sanos
y Provinciales,
y
aun alguno Nacional, que pro..:
mueva la autoridad del Rey.
.
87
1
·Atribuye las desgracias
d~
España, que recopila en
estos seis años, á, que los Fiscales
.y
Ministros hán buscado arbi–
trios para gravar el Clero ; citando, que el Sr. Felipe IV pidió
absolucion á la Santidad de Urbano VIII por haber cobrado al–
gl.m
tiempo los Millones sin Bula.
87
2-
Recuerda
á
el
Rey , que habitndole hecho creer lo
q ue contiene
la
Pragmática de
1
8
de Enero de
1
7
6
2-
sobre pre–
sentacion de Bulas , en que con errada inteligencia , dice , se
ci–
taba una Consritucion de Benedicto XIV, no solo la revocó S. M,
•
1
1
d
1
smo que a man o recoger.
87 3
Y concluye
el
R. Obispo con exortaciones , manifes–
tando , que aunque empezó á escribir de su mano, le fue preci–
so valerse de su Secretario, que era de toda satisfacion y secreto;
. por '1o que espera de la piedad del Rey que se dignará perdonarle.
87 4
En qnamo á las noticias de Gacetas y Mercurios, po–
'dian h aber avisado
á
el R. Obispo los que le hubieren suminis–
trado las especies , que
el
que
se
recogió , fue detenido de órden
de S. M , cuya religion y piedad hizo la demostracion de mudar
'de Traductor, suspendiendo la pension que gozaba
el
que acaso
inoceme.mente
r~d~xo
á nuestro idioma el !\:1ercurio de la Haya..
87 5
Esta es la conducta de nuestro Monarca y su Gobierno,
por
el
descuido con que se traduxeron las controversias, que saben
todos hubo entre
el
Santo Papa Gregario VII y
el
Emperador
Enrique III , acerca de puntos, que sin duda herian la potestad
temporal. Asi se maneja
el
religiosísimo Cárlos
III
para evitar
toda censura,
y
aun
la menor sombra de tibieza hácia
el
res-
.
Mm
pe-
Gacetas
y
Mer–
curios.
N OTA.
El R. Obispo toca
estepunto en
el
n.
58
de este Memo–
rial;
á
que satisf1-
ce
el
S?.
Carnpomá–
nes
desde eJ
n.
952
á
954·
Malos sucesos de
España.
N OT A.
T rata esto el R.
Obispoal
n.
6o.
El Sr.
Campomá–
nes
responde sobre
el
particular de Ja
Pragmática
sobre
p resentacion
de
Bu–
las desde el
n.
I I
28
á
1162.
Yengene–
raJsobre
el
todo de
las R epresentacio–
nes del R. Obispo,
desde los
nn.
9 36
á 95I ,955 á 965,
968
á
97
I ,
977
á
1017 ,
roz8,
1 r62
á
I
18 2~