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J,1'
011.\C.IOI'i VOCAC.
33!)
ORACIO~.
Señor mio Jesucristo, por ª'lnella agouía de n111erte
f!llC
r. n el
Monte Olivete sentiste,
y
por la fervorosa oracion que hiciste, y por
el copioso sutlo1· de sangre que allí denarnaste , te suplico humil–
demente la ofrezcas de nuevo
á
tu Eterno Padre (como yo la ofrez–
co), en descuento
y
satisfaccion de mis pecados, y me libres cu la hora
<l.e mi muerte de toda la angustia
y
pena ']lle mis culpas merecen.
Acabada la confesion se llega el sacerdote al altar como quien
se ofrece con grande ánimo
y
aficion <1 la muerte;
y
así luego
l.licc
el Introito,
é
invoca
y
llama
á
Dios en su ayuda diciendo:
J(yric
eleyson
(que quiere decir, Sefior, misericordia ), e11 memoria de la
oracion tan fervorosa
y
repetida que Cristo hizo en
d
lJ
uerto.
Lnc–
go se dice la gloria, 11ue significa la venida tl el ángel sa n
Gabriel~
á
confortar á su Rey
y
Sefior;
y
para que entendamos <¡11e el
fi11
para que se ofrece
y
se asiste al santo sacrificio tic
la
misa, es para
gloria de Dios,
y
para alcanzar
la-
Bienaventuranza;
y
que
110
le
pedimos su misericordia, principalmente para cosas. temporales, si–
no para glorificarle y alcanzar la gloria eterna, que es el Üu donde
han de ir enderezadas nuestra s obras.
El oyente dirü 11ueve veces :
S efíor, misericordia:
y luego,
Com–
padeceos , Dios mio, de mi,
y
ele todo et piwblo cristiano, redi–
mido con
ta
Sangre preáosa
lle nii
Sefior J es'ucristo, por citya
miseri·cordia fuimos tiúres
y
salvos,
y
claclnos· viwstra graci'a,
71cira que en esta vida os sfrva
y
en
ta
gtori'a os gocemos.
Acabada la gloria, se vuelve .el sacen.l-0Lc al pueblo,
y
dice·
Do–
rnz'nus vobz'scum,
que es decirle, Dios esl:i-con vosotros , aq11í está
presente,
y
os oye y recibe vuestras oraciones. EstaLl co11 rcvrren–
cia y atenciou en su prese uci::i. Haced lo c¡ue hace is, no os distrai–
ga is,
y
responde el mi11istro por todos los oyentes:
Et
citm
spiritit
tuo.
El mismo Seiior esté con vuestro espíritu para c1ue hagais lo
que haceis con la devocion y espíritu con
q11c
conviene. Siguiéu_
dose luego las oraciones que llaman Colecta, porque en breves pa–
labras se cifra, y abrevia lo que
{t
Dios Pildre se pille para bien de
la
J
glesia Católica.