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..

176.

~RATADO

TERCERO

mente

á

ºtros; pero para que . sepais (dice Séneca)

(1)

cuán locos ·

están los que se dejan llevar de fa ira , miradlos á ellos,

y

mirad

un loco;

-y

no hallareis diferencia alguna. Vereis en el ·loco furioso,

qu.e. echa centellas por los ojos,

y

escorpiones por la boca,

y

el

rostro encapotado, el semblante triste , el andar apres.urado, las

manos inquietas, el color mudado,

y

unos suspiros frecuentes sa–

lidos de lo í11timo del corazon. Vereis en el airado el .rostro ericen-

1Jido, centellarle los ojos, temblarle los labios, apretar los dientes,

c•r.izársele el cabello, no acertar

á

habhu, faltarle la respiracion,

torcerse las manos, gemir, bramar, <lar palmadas

y

golpes, decir

dispara.tes,

y

pelarse las barbas;

y

si le preguntais por qué hace,

ó

dice aquello, responderá : no estoy en mí. Por lo cual aconseja–

ba Platon

á

sus discípt1los, que cuando estuviesen airados se mira–

sen al espejo' porque viendo su rostro semejante al de un loco

fu–

rioso, colirarian tal horror, y concebirían tanto ódio contra la ira,

que jamás se dejarian vencer de ella, como le aconteció

á

Galeno,

.que viendo

á

un hombre airndo hacer disparates, no .se mostró

airado jamás. San Basilio lo encarece mas, diciendo

(:2) :

que el

aii·ado parece endemoniado, revestido · de Satanás; hincharse como

un sapo; hace espuma como caballo; rclampagueándole los ojos

cómo al dragon; alborotásele el

pe~ho

cual mar turbado,

y

muda

mas colores que el camaleon.

El sesto, que es mas penoso dejarse llevar de la il'a, que el

.Yencerla,

y

mortificarla , porque es de

cast~

C:le víboras (3) , que

al nacer, lo · primero que hacen es dar la muerte

á

quien las

engendra. El santo Job dice: qué la ira quita .la vida al necio

qu.e se deja llevar de ella, porque es como una espada , que hace

c:imino para las entrañas de su dueño ; como un caballo desboca–

do, que si no lo sabe goberna'r despeña al caballero; ó como una

peligrosa borrasca, que si con tiempo no se ancora bien el navío,

da .con é'l en los abismos; ó como los hijuelos de la víbora, que

á

la salida le rompen las entrañas. Mira cuál quedas cuando clijiste

. (1) Lib.

~.

de ira cap.

1.

et 2. cap. 35. -('2)

Ro111.

10. de ira .-(3) Greg.

rn cap .

4.

col. c. 5.