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,
1
.
.
~
Dioni.HoAre0pagita, que· tuvo la dicha de hallarse -presen–
te,nombra en particula-r
á.
san Pedro, al cual le llama
la suprema cabeza de los teólogos; á Santiago por sobre–
nombre el he.r:mano del Señ.0r;
y
á
los otros, príncipes
( ·como él --los llama) de · la ·gerarquía. ·eclesjástic;a;
y
á
m
as deéstos,
á
san Timoteo, primer obispo de
Efes~,
y
á
otr.Qsmuchos: discípulos de los apóstoles, de cuyo nú–
m
ero era el mismo san Dionisio ; el que cuenta todo
esto como testigo de vista en la carta que escribió des–
pues al mismo S. T imoteo. Ved aquí sus palabras:
Quarzdo
nos quoque, ut nostri., et mult i ex sanctis nostris f'ratri–
bus ad cO.ntuendum corpus quod vita? priné'ipium dedit, et
Deurn suscepit, co11venisse1nus:
(
aderat autem et Domini
f'tate.r J acob, et ( Petrus suprema et antiqulssima theolo–
gorum surnrnit as) et visu sacro corpore, placuit omnibus,
prout quisque poterat, hymnis celebra·re infinitam bonita–
tern .
divina? patentice.
Nos encontramos, dice, todos .jun!"
t os. , comó sabes , con los santos apóstoles
y
muchos de
nuestros hermanos, : para obtewer_el consuelo de ver por
la última ·vez
á
Ja que babia concebido
y
parido al que
es el princ ipio de la vida,
á
Dios hecho hombre, prin–
cipio de nuest ra salvacion.
~
Jacobo, por sobrenombre. el
hermano del Señor, estaba
pres~nte,
co1ino tambien
Pe–dro, prfncip:e
·d.e
los
1
apóstolef,
y
suprema .maestro
1.deaqqella ,cieoda que
tiene pór obj(}tO á:
Dios
y·
á
las cosas
tCVJ:!ladas por D'ios ). Habiendo, pues , ·,v.is;to aquel santo
cuerpo ~ -·
nos- p:a..reei0
á
todos
honrarle
lo mejor que pu-·
diésemos -con himnos y cánticos·, y alal?ar la bondad in-:–
finita
y
h
,om1Jip0ten -..ia de Dios, que babia hecho tan–
tos pro :iigios en s1.1
favor. Hasta aquí son palabras .de·
san Dionisia,
pef~rídas_.por sa ~ .
Juan 'Damasceno, de
la~
cuales se sirve la Iglesia ·en el oficio de
la '
Asl:lncion el
dia die:?f
y ,
ocho..:-de- acgo-s to, que
es
el cuarto -de la oc-
tavai.
..
,
·
Estando la san tísima Vírgen en medio .de
u~na
tan•san–
ta, tan escogida
y
/tan respetable asamblea, consolando
á
todos sus queridos hijos los que _estaban hechos un mar
de lágrimas,. despues de
~haber
ex-hortado
á
los apóstoles
y
:discípulos
á.
predicár . el
1
evangelio con
mas1~ánim-o
y
zelo-i
que
nunc'a, ofreci€ndo
á
fodla la Igle.sia su podero–
s~
proteccion
y
su ternura, vió comparecer al Salvador,