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VIDA DE CRISTO
son como el dia de la octava ; finalmente, su gloriosa as–
cension
á
los cielos el dia 40 des pues de su resurreccion;
y
diez dias despues de la ascension; la venida del Espíritu
sa nto en figura de lenguas de fuego sobre sus apóstoles y
discípulos , el santo dia de Pentecóstes, como el Salvador
divino les babia prometido;
y
despues de todas estas
grandes solemnidades, la fiesta de la Eucaristía, llamada
la fiesta del Corpus, una de las mas célebres
y
mas privi–
legiadas, como que encierra
y
contiene en sí todos los otros
misterios; pues la divina Eucaristía es como el compendio
de todos, siendo como es la representacion real de su
muerte, la obra mas grande
y
mas excelente de su om–
nipotencia y de su sabiduría, el milagro, digámoslo así, de
su amor, y como el compendio de todas sus maravillas.
Ademas de todas estas fiestas solemnes
y
universales
de los principales misterios de nuestra religion., ademas
de las de la cruz adorable de Jesucristo, principal instrumen–
to de nuestra redencion, se celebran tambien en algunas
iglesias particulares las grandezas de Jesus el
28
de enero;
la fiesta del santo nombre de JesHs el 14 del mismo mes,
ó la dominica
2.
a
despues de la Epifanía; la de las cinco
llagas., monumentos eternos de lo que le costó al Salvador
el redimirnos; la de los santos clavos, y de la corona de
espinas , de que se hablará mas adelante.
Se ve finalmente celebrarse el dia siguiente á la octava
del Corpus la fiesta del sagrado Corazon de Jesus, que es
la fuente de todos los beneficios de que el Salvador nos ha
llenado, la silla ó centro del amor infinito que nos tiene,
y
el principio de todos estos grandes misterios: se ve,
vuelvo á decir, establecida el dia de hoy esta fiesta en una
infinidad de diocesis, en la mayor parte por voto, con
motivo de la enfermedad contagiosa con que la Francia
ha sido tanto tiempo afligida. La liberalidad con que los
sumos pontífices han derramado por medio de muchos
breves los tesoros de la Iglesia sobre todos los que tienen
esta sólida devocion en el corazon, autoriza bastante su
práctica.
(1)
Aunque esta devocion, que no tiene por obje–
to .sino el amor inmenso de que está abrasado el corazon
(1) A instancia del Rey nuestro Sr. D. Fernando VIJ. expidió el Papa Pio VII.
eo
7
de diciembre de 1815 el breve para que se celebre en todos los reynos
y
do–
minio¡ de España dicha festividad el viernes despues de la octava del Corpus.