Table of Contents Table of Contents
Previous Page  219 / 356 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 219 / 356 Next Page
Page Background

DE CUARESMA.

2 09

a c aba de poner el colmo

á

tus d elitos: juez inicuo, que

ha ta aquí has opr imido

á

tantos

inoce~tes ,

y

que co–

r rompi do con el oro has d ecla rado inocente al cul pable;

si

e

ve rdad que habeis sorprendido

á

esta muge r en

culpa , dime :

i

baxo qué árbol

Ja

habeis encontrado con

u galan? Baxo un lentisco, respondió el viej o. Con gran

d e vergü

nza

has mentido, replicó Daniel; pero tu des–

caro va

á

c aer sobre

tu

cabeza. H abiendo hecho retira r

á

és te, manda que le traigan el ótro. Luego que és te se

presentó, le dixo D a niel lleno de indignacion: Raza de

Canaa n

y

no de Judá, la hermosura de esta muger te ha

deslumbrado,

y

tu

brutal pasion te ha pervertido e l co–

r azon,

y

te ha hecho olvidar que eras juez. No e es te

tu primer delito; pero será el postrero. Ni tú

ni

tu com–

pa ñero habeis hallado en esta verdadera hija de

J

udá la

mi ma facilidad que encontrábais en las hij as de

1

rael,

que de mi edo

e

dexaban pervertir por vosotros;

y

pue s

a egura

tan confiadamente que la has encontrado con un

jóven, dinos:

i

baxo qué árbol los has sorprendido?

B -

xo una <::oscoja, respondió éste. Mentiroso, replicó Daniel,

cmbu t ero: iCÓmo tienes valor para calumniar a sí

á

una

inocente ? pero no tardarás mucho en paga r la pena de

tu

me ntira. Vi e ndo todo el pueblo

á

los dos vi ejo

t a n

ln r mente confundido por su contradicci n, le vam ó el

g rit

bend ic ie ndo mil veces al Señor por hab r e se rvi–

do de un niño pa ra confundir la iniquidad de lo do vi e–

j o ,

y

h::i

er triunfar la inocencia de Susana. No hubo ne–

c

id ·1d de otras formalidades: los do

vi ejos mal vados

fu e ron llevad

a l mi mo in ta nte al upli io ,

y

a pe

r

d

un

la 1

y

d Moy e

, q ue m ndab

q u

los ca -

1umniado re

y

te tigo

fal sos

fue

e n conde n do

á

la

mis·

ma

pe na que mer ecia el delico de que acu a ba n

fa! a·

m nt

á

1

s

6tro . H

Je

a

y

su mu

e r,

padres de

Su a–

on J oaquin su ma rido

y

su pa rie nte , fueron

á

d

r

á

pi

-,

~

rque n

fin,

habí a h

l1o

pa l a l

l

rnocen

1a

y

el

p

t ri r

la

· ti da

:i

1

un

ha

m n

io n

l< E - ri cur d 1

nti

n.1 e

:i

~ma

el m d

1

e l

fe

dJ "

t:n · su m riJo .

Es to

T

111.

JI.