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SEGUNDO DOMINGO
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habla así al pueblo,
y
les predice el Mesías; el cual debía
ser el autor
y
el principio 'de su
felicid~d
despues de ha–
ber sido el objeto de sus deseos y de sus suspiros. Todo
arte de adivinar estaba prohibido á los hebreos:
Quando
ingressus fueris terram, quam Dominus Deus tuus dabit
tibi,
les dice el Señor,
cave ne ;mitari velis abominationes
illarum gentium:
cuando hubieres entrado en el pais , que
el Señoi: tu Dios te dará , guárdate bien de imitar las
abominaciones de aquellos pueblos. Estas abominaciones
eran las supersticiones que empleaban los paganos para
saber las cosas venideras,
ó
precaverse de los accideqtes
fatales de la vida, como eran pretender purificar los ni–
ños, pasándolos por el fuego:
Qui lustret filium suum, aut
filiam, ducens per ignem.
De esto, sin duda, tuvo prin–
cipio
la
supe11sticion de que habla san
Cris~tomo
de· sal–
tar por encima de las hogueras, supersticion que Teodo–
reto
y
el concilio
in'
Trullo
condenan con razon , como
una reliquia de las antiguas impiedades del
paganis~o.
Asímbsmo consultar adivinos, creer en sueños
y
agüeros,
· y
los que se ponen
á
adivinar:
Qui ariolos sciscitetur,
et
observet somnia, atque auguria;
y
todas
las otras s_upers–
ticiones que refiere Moyses en el capítulo 18 del Deute–
ronomio,
y
que el Señor abomina:
Omnia enim hcec abomi–
,natur Deus.
No debeis turbaros , añade el Profeta
¡
de
que no hay entre vosotros personas que os descubran
l~s
cosas futuras
y
desconocidas, Dios suplirá con ventajas
esta falta> de ·adivinos
y
agoreros' de e.qcantadores
y
ma–
gos por un profeta que levantará de entre- vosotros,
~el
cual 'os manifestará sus voluntades : no tendreis necesi–
dad de ir á buscar entre las rtaci9nes extrangeras qu.ien
os instruya, Dios os dará un profeta de vuestra nacion
y
pais. el cual no tendrá menos conocim'iento que yo;
us
enseñará el verdaderd camino de la salvacion
y
las sen..:.
das que conducen derechamente á la vida :
Prophetam de
gente tua, et de fratribus tuis; sicut mé, suscitabit' tibi
Dominus DeusA
Dice que será
como ·él,sicut me;
es'decir,
profeta, legislador, rey, mediador, caudillo del pueblo de
Dios; en una palabra, será la realidad
~e
lo que 'Moyses
no era sinó la figura.
.
·
Es co9stante, que el profeta de que habla aquí Moyses
no es otro qu'! el Mesías ·prometido. Los mismos judíos