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200 DOMINGO .
, ,_. ~ ..' P. 'RJ ¡Q P O S 1 T O S.
:J~~- <·~gi el ene~·ig,0 :·~e. la -salv~cioa · e~plea ~~do~ sus
avfificios en' festos diás últimos del ·Car'aaval paTa enga–
ñará .la&.almas por · el atractivo de los placeres y de
las diversiones que el espíri~u del mundo ha introducido,
no ~e.faltan indust<rias al Espíritu santo para santificar las
almas con'>exeki"í:ios cl.eipiedatj. que tia autorizado la lgle–
s1a.t$pn .pocas el día de boy las ciudades eci'. que 1 nq es.
té· ~stablecida la indulgencia ·ibmada 'Vulgarmente jubileo
de C!Jarenta horas·., Asírp'iismo hay pocas donde no haya
@x~r.cicios de devocion, que·SO'n. como otras tan2'~ barre–
ras l~om a lo esfm~' zas del ':demonio, bas~an te cr rpaces de
~r. .inútiles pe:rxrioiosos arf · . Hazte una
l~ deHre-eue'ntar ,: 1.dunaure, esos tres d1as, todas estos
e.Xendcios ~de · pi€dad•: no re :-dtrnes arras~rar del mal eocem–
plo; y cuando, por desgracia, todo el mundo corriese en
t 11 :'?as á esas asambleas de iplaceres, al bayle ,'á los íex- ·
p ,:áculos, imira tú al santo1)1ombre Tobías. el cual,
· :ue;~n urn paiis extraño, ·mientras r©db sus compatrio.
t as iban 1á adorar al be·cerro de oro, él solo huía de la
compañía de todos los ótros: Hic solus fugiebat consortia
OJYfniun~. ,,se encaminaba á Jerusalen al templo del Se–
ñor, e :¡ LÓnde adoraba al Dios de Israel: Et ibi adorJlbat
Domit/ }11 Deum . Sirgue generalmente este exemplo:
dex .Jf11e vayan á los espectáculos aquellos á quienes el
e~plrttu deb'Ihundo fua engañado. Por lo que á ti toca,
pasa estos tres días en los exercicios de piedad , visita' los
pobres en los hospitales; y sobre todo asiste cada dia á ·la
oracion y funciones d.e Cuarenta horas;
.2 ~bais· gent(\!S del i.muhdo, que no están anjmadas. si–
no de·-su e~r:.tu, .i pervierten• laslJJilas gentes que· pueden,
á fin de tener mas -compañeros en sus excesos., y aumen–
tar el .mínnercr 'de .los que ·se 1 ~ierden. Por lo que mira á
.ti., .ten odavfa mas eelo .por la gloria de Dios, que los
muro.danos por ·el amor á.. quiea sirven. Oorrquista para el
Señor las mas gentes que puedas, empeñándolas con san–
tas industria~ á emplear este precioso tiempo en santos
exercicios. No dexes de confesar y comulgará lo menos
uno de estos tres dias. Asiste frecuentemenJe á los sermo •. ,
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