DES-PUES
DE
PENTECOSTES.
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lladon, que es un eficaz remedio contra la hinchazon del '
'
,
corazon.
2
No es siempre el natural
o
el humor quien hace
a
los amos tan delicados,
y
tan poco sufridos : un ol'gullo .
secreto es las ·mas veces la causa de esos ímpetus fogo–
sos,
de esas prontitudes arrebatadas
que
tienen. La hu–
mildad de corazon es inseparable de la
paciencia
y
de .la
1nansedumbree
No se puede sufrír una palabra de ménos
respeto:
la poca
exactitud
de un criado enfada,
y
hace .
sáltar : la lentitud
y
sorna de
los
-que
están baxo de nues–
tras órdenes nos choca: su.poca
deferencia
a
nuestras insi–
nuaciones nos pone de mal humor. Llama
a
estas impa–
ciencias Y. enfados con el nombre que se te atonje : colo–
rr
. o-e.
n~-
1
pretexto
que
quieras ; lo
que
debo decirte
es , que serias mas paciente
si
fueras ménos soberbio. Em–
pieza
desde
ahora mismo
a
pone~
por
obra las reglas si–
guientes. Primerá : Excusa con caridad los defectos age–
nos,
y
no permitas jamas que los que
dependen .
de
ti
ha–
gan platillo <le ellos. Segunda : Quando se ha. faltado
en.
alguna cosa
que
toque
a
ti
personalmente, como en
der–
tos cumplidos, en no sé qué obsequios
que
pide
la urbani–
dad
y
la decencia; quando alguno se ·ha olvidado de ha–
certe ciertos pequeños
se~vicios,
no pierdas el mérito de
estas pequeñas humillaciones. La falta de memoria
ú
de
habilidad
en un .criado,
la
impolítica de mil gentes, et
mai corazon de tantos falsos amigos te darán cada dia
bastantes
motivos
de hacer pequeños
sacrificios: el
amor:
propio saltará , el orgullo ·lo repugnará ; pero
t~
serán de
merecimiento, si sabes aprovecharte de e
t~s
freqüentes,
pero preciosas humillaciones. Tercera: Dite
much~ s
veces
a
ti
rpismo cou
_San Bernardo : Yo adoro
a
un
Dio.s
humi–
llado
por
mi amor
hasta la muerte de cruz;
¡
y
con todo
éso
no soy humilde!
·
no.. ,,