Table of Contents Table of Contents
Previous Page  136 / 416 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 136 / 416 Next Page
Page Background

126

DOMINGO NONO

"vertir;

y

pa ra esto les t rae el exemp1o de los israelitas,

"y

los

terri bles

azote~

con que Dios castigó

sus

pecados.''

.

R E F L

E

X 1O N E S.

Ez

que j uzga estar en pie y tenerse firme., cuide no caygtt.

La

presuncion inseparable de l orguilo,

y

de

una devoc1on

~parente,

es el origen

oa

lo

rpénos la

o ~asi

n

de

infin itas

caida.s.

En

hecho de mor

1 nunca está uno mas

pronto

a

caer, que quando no teme la caída . Una alma santa siem–

pre es timorata. Quando

uno

es verda eramente .devoto,

es humilde;

y

quándo es humilde , desconfia siempre de su

propia virtud. Solo esas almas l 1enas de la idea de _sí mis–

mas

y

de' su pretendido mérito, son vanas

y

pcesunt as;

y

las caidas mas funes tas que

da~

, son el efé:éto mas or–

dinario de

su

pre uncion. Pocos siglos son los

que'

no .nos

hayan pre.sentad'o tristes exemplos de nuestra flaqueza .

Se

han visto colu'mnas de la Igl esia desmoronarse .

y

caer en

' medio de la calma; baxeles ricamente carg

dos~

despues

de una larga

y

feliz navegacion ; despues de haber resisti–

do

a

las mas furiosas tempestades '

ya

las olas encrespadas

que pareéian se los iban

a

tragar; despues de haber salva–

do 10s bancos de arena ,

y

los parages mas arriesgad

s

del

mar, padecen un t riste naufragio dentro del puerto

; o

en

alta mar,. en tiempo de la mayor bonanza. El mismo

Da-·

vid, aquel hombre segun el corazon de Dios, escapado de

tantos peligros, tan fi el en las mas terribles pruebas ,

da~

una funesta caida en medio de la abundancia ., y en el seno

de la paz. Salomon ,

a~el

rey tan sabio , tan ilustrado, tan

religioso' al qual la sabiduría

y

la piedad hacían la admi–

racion de su siglo : Salomon, el oráculo de su tiempo, cu–

yos escri tos son la obra del Espíritu santo,

y a

quien Dios

había dado la sabiduría en herencia : Sa omon , en fin , cu·

yo elogio , por decido ásí, le hizo el mL,mo Dios: Sálo–

m9n

~

despues _de haber como envejecido en la práctica de

la virtud, cae en los mas vergonzosos excesos ;

y

despues

de haber edificado un

magnífi~o

templo al verdadero Dios,

permite que se

fabr~quen

templos

a

los fa lsos Dios s

a ;)

propias expensas, y él mismo cree en la Idolatría. Júdas,

llamado al aposJolado por el mismo Jesucrisw, criado en

la escuela de este divino Salvador , colmado de sus favo·

T

~S