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QUARTO SABADO
t ierra de promision: hay bastante camino que andar des–
de Babilonia hasta la celestial
Jerusal~r:i;
pero ne temai,s,
el Salvador conoce vuestras necesidades, no ignora los pe–
ligros,
sabe
lo
'JUe
es necesario para · conservar la vida,
él
os proveerá
de todo:
Non esztrient, neque sítient,
&
non
percú~iet
eos cestus,
&
sol
p
no . t endrán hambre, ni
sed, ni el
calor '
del sol lós incomodará:
Quia miserátor
.eo r_um
reget eos,
porque el que se
co~padece
de
ellos,
los guiará
y
llevará
á
beber
á
las fuentes
de
las aguas:
Et ad
fontes aquárum potdbit eos.
i
Quien no ve en esta
alegórica
y
profética pintura la imágen del
cristianismo~
¡Que multitud de socor ros espirituales
!
¡Que abundancia
de bienes en la Iglesia
!
Por mas sedientos
y
abrasados
/ que os sintais 'por
la
fatiga del camino, por el ardor
de
' las
pasi0nes, por los combates ,
que es
preciso sostener
durante esta vida ,
á
toda hora hallaréis esta
fuente
de
agua viva
't
que no
cesa de
cor¡er,
y
que se bebe sin tra–
bajo :
H
auriétis aquas,
dice en
otra parte
el
mismo
pro-
- fe ta,
cum gáudio de
fóntibus Salvatoris,
sacaréis
y
bebe–
réis
con alegría las aguas
de
las fuentes del Salvador. En
.lugar
de aquellas aguas que vuestros padres bebiéron en
el desierto,
quando
M~yses
hirió
la piedf.a de que
hizo
salir una. fuente, vosotros beberéis las aguas del Salvador.
Este
Salvador es Jesucristo,
las
fuentes que nos abre
son
su · doctrina santa , dicen
los
padres , son sus
sacramentos,
de
los
quales corren las gracias sobre los que se
llegan
dignamente
á
ellos,
y
apa rtan los embarazos que pueden
detener su curso.
El
mismo
Jesucristo nos dice, que
si
at...
guno tiene sed, vaya
á
él
y
beba,
y
que el que bebiere
del
agua que este Señor le dará , no tendrá jamas sed. Mis
montes, prosigue
el
Señor por su
p rofeta,
se
convertiráa
en caminos llanos, y llenaré los valles para hacer un
ca–
mino $eguido
y
uniforme. No os aterren las máximas de
fa
mas al ta
pe.rfeccion,
ni los consejos del evangelio , tan
conformes
á
la razon, como
contrarios
á
los sentidós
y
al amor propio : todo lo hallaréis ll ano desde el punto que
os
pongais en camino : todo· lo halláréis suave , todo
fá–
cil
desde el pun to que vengais
á
la
execucion,
No temais
extravia ros,
porque
yo mismo seré vuestra guia,
·y
en–
derezaré
todos vuestros caminos: los que dan n des!;>ar–
ros son los que
están fuera
de
la
Iglesia : los
senderos que
.
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