QUr RTO DOl\1lNGO
oficio ha querid o de ¡.{ir de la Escr itura los pasages que
ha.y
mas pro pios pa ra exer citar en sus hijos un gozo todo
es piri tual :
[, (etátu's su;n in his, qua? dicta sunt mihi: in do–
rn ·11n
Ddmini fbimus.
Nie
he llenado de
gozo
quando me han
dich.o que irémo.:;
á
la casa del S.Jwr : por estas palabras
em p:ez.i el salmo
12r ,
que ·contiene los sentimientos
de
aleg1 ía
del
pueblo judaico, quando se
vió en
vís peras
de
sa lir de
la cauti vidad
de Babi ón ia;
ense ñándo!1os
el
Es–
píritu
~anto
con
e.)tas 1l uras quáles
deben
sn
nue·stros
sen–
t im ientos por el cielo, r. uestra
verdadera
patria;
y
dispo–
niéndonos
la Iglf' sia p r
estos sentimientos de goze>
para
la
tristeza
que debe
producir en
nosotros
la pasion del
S_l vador, que
se
empieza á celebrar el domingo siguiente,
y
para la aLg ría de la resurreccion , fignrada
en
el
fin de
la cauti vidad de
Babilonia , como tambien
en
la
salida
de
E gipto. Con
el
mismo
fin
de
inspirar
en
este dia
e, tos
sentimientos de alegría
á
sus ·
hijos, esparce
la
1glesia
el
dia
de
hoy
flo~es
sobre
sus altares, y se sirve
del órgano
pa ra la
celebridad
de Ja fiesta ;
lo qual
es
una espec1e
de
ali
vio ,
dicen los autores ma
críticos, que·
la
Iglesia pare–
ce procurar
á
los
que
han pasado
felizmente
la mitad
de
la carr ra de !os
ayunos
de
quaresma. Asímismo
se ha ele–
gido algunas veces
en
Roma
e'ste
domingo
para hacer la
ceremonia de la
coronacion
de los
emperadores cristianos.
El papa rnocencio lV en su sermon sobre
este
quart.o do–
mingo , dice que
el oficio de este dia
est á
todo lleno de
sen–
timientos de alegría : los
cardenales dexan ·en
él el color
morado ; pero
la mas vistosa
de
las
señales
y
ceremonias
que nos quedan de la fiesta <le este quarto domingo, es la
de
la ro3a
de
oro ,
qu e
se hace en Roma
este
dia ,
y
que
la
ha dado tambien el nombre
del domingo
de la Rosa.
Esta
ceremon ia consiste en
la bendidon
solemne
que
ha–
ce
el
papa de una
rosa de oro en la
iglesia de
Santa Cruz
de Jerusalen:
despues
de la
misa,
el papa, acompañado
de los
carden,ales
en hábitos morados, vuelve
procesional -
mente ll evando la rosa de oro, la que
envía
despues á al–
gun príncipe.
La
epístola
de Ja rriisa de este
dia
contiene
las ins–
trpccioues que da San Pablo á los
fl Pl P"
~ ~
';alacia,
don-
de
contrapone la
libertad de
la
1
la
servidum-
-
bre
de la antigua
baxo
la
fi~1
de Abrahan,
'
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