SEñOR
NUESTRO.
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Huíd toda ostentacion en vuestras buenas obras
se obra mal desde el punto ,que se hace
~I:
ir.dedel l;>ien:
no hagais nada con
el
fin de ser vistós - - estimados de
los hombres; la hipocresía es una impiedad duplicada :
sed amigos de orar; pero orad con
_humildad~
con
con~
fianza , con fervor y con respeto. HabiendoJe dicho
los Apóstoles que
lo~
enseñase
a
orar, como J uan .ha–
bía enseñado
a
sus. Discípµl os, les dixo : Quando te–
neis que orar, debcis orar de este modo:
Padre nuestro, que estás en los Cielos':(c)santificado
sea tu nombre. Venga
a
nos el tu .Reyno. Hagase tu
voluntad, asi en la tierra como en
el
Cielo.
El pan
nuestro,
o
que necesitamos para nuestra subsistencia,
danoslo hoy.
Y
perdonanos nuestras deudas, así con1o
nosotros perdonamos
a
nuestros deudores.
y
no nos
dexes caer en la tentacion. Mas líbranos de mal.
Amen.
(así sea) Pero quando orais, no imiteis
a
los hipócr itas,
que gustan de orar de pie derecho en las Synagogas,
y
en
las Plazas,
a
fin . de ser vistos de los hombres; en ver–
dad os digo, que
los
tales ya han recibido su r ecom–
pensa. Quando vosotros hubiereis de orar, entr ad en
vuestro quarto y cerrando la puerta luego que esteis
dentro,orad
a
vuestro Padre en secreto_
y
v ue tro Pa re
que vé
lo
que está secreto, os recompensará v uestra.
orac10n.
Procurad , que vuestra oracion v aya acompañada
con
el
ayuno, es decir, con
la
mortificacion ,
y
de este
modo será eficaz ; pero en vuestras morf fi caciones .
no imiteis
a
los hipócritas, que afeétan par
er p-< lidos
y
desmayados poF la abstinencia. Tened siemprf' una
cara alegre y serena el dia que ayuneis, par a q e olo
D1os
(e) Matb.
6.
'