(~
2)
que
esta falta - de
tnedi-Gs
les ocasiona · inceS
\lntemen.tecon ...
t!nuos choques
y
disputas, que los ari'Uinan . PB'i·ece· que el
defensor del matrimonio
encuentra el remedj.o- nnivers-al en
este enlace, no
solo para salvar
'al
cuerpt> pol'itiie0· de los
graves males que
lo aquejan, sino
tamhien pa·r·a
(lar
a
In
Iglesia pastores
it·t·eprensibles
y
Eclesiasticos
d~gno-s
de· la.
s~ntidad
de
los primeros tiempos det Cnlolr-si:s rno·. Mas
110'
advierte que el aumento exesivo de· la póblaeio11
es un gran.
111al, porque ocupildos todos
los let·a·enos por los pobhrdhres·r
no alcanzan los me-dios de· subs-is-tt.neia para proyeel"
á
sn con·
servacion
y
á las comodilla·des- de la vida; si se muiLiplirasen
indefinidamente los homht·esr la maym··
parle
de ellos· set·ia ar._
r~batada
por el hambt·e
y
·enfermedades, otros ltJch:and·o· can–
tra la desnudez,
~Y
las pTiva:cÍtl'ntlS ceóet·mn
ar
crimen,
y
condni·
rian sus dias en las du·celes
ó
en el
~atibtrlo.
·
, que cnndu._
ce en tal caso el
t ·
1io de los e Lesias•ico
cuando por-
la co¡·rupcion
~e
1
t
bres ,
y
.PC!ll'
la e aces de
re~ors0s mU'~
· chos seculares se v n
la neeesta&d d-e hacerse célrbes
y
eJe
mit·ar con avearsi
~
oc1 dad· cony gal.
Estando-cul~ívodos
to-
dos los torren
,
V
pro
lTCI
1d0
CO'll
arregJ· '
a
la
~ndu.strl8l
d·e(
hombre, el resto de la pob-llwi-on solicitaría inútilmente la
fte~o
cundirlad de la tierra. Si
tooos.
Jos
paises
llegasen
á
estar
pehlados, serian insignificantes
la
emigracion
y
co!onizacion,
y
pereseria la sociedad
baja
el peso de la p,oblacion que bu–
hi!'lra fomentado para que la devorase. Asi como .en la · Chi–
n~,
el que naciesa seria condenado
á
mori·r de hambre,
y
los
eclesias1icos que
cump1ie::~en
,este de-ber, que el Sr. Vi gil lla,.
ma de todos los ciudadanos, verian en pn>mio espirar de mi–
seria
á
sus familias: Los pobt'es se resolverían
á
prec·ipitar en–
el rio
á
los hijos que no pudiesen alimentar. Convenci-do de
esta vea:-dad ha dicho un polílrco; que no debra permiL_irse el
matrimonio de los indigentes,
y
que es un deb-E>r no ca!tavse,
cuando no se pueden asegm·as·
á
los hijos los medros de vivi-r,
que la lei impone al magistrado la ol>ligacion de hacer re pe–
tar todos los deberes recíprocos,
y
no abusa de la aulos·idad im·