CAPITULO XXXVI.
non
est · mulier ,
ingemisdt
egens.
28
i
Quis credit ei qui non
habet nidum , et defleCtens ubi–
cumque obscurabit , quasi suc–
cinCtus latro exiliens de Civi–
tate
in Civitatem?
•
Sin consuelo
y
sin apoyo. El Grie–
go :
Vagmnundo;
andari vago
y
gim.ien–
do ,
y
tendri que salirse foera de su ca–
sa , buscando entre unas y otros quieu
alivie sus penas, porque en ella no
hay
quico le consuele. Otros :
Enganado
,
o
por otras mugeres , o por los
criado~
q
e 1io cuidari n de sus cosas con el in–
te res
y
esmero que una muger propia.
:Ii
Nadie se puede fiar del que no t ie–
ne
'casa , o domicilio fixo
y
propio.
de no hay muger, suspira el hom–
bre
en indigencia
1 •
~8
iQuien se fia de
aq
1
uel que
no tiene nido
2
,
y
q
ue para en
donde le toma la noche , como
un
ladron expedito
3
q
ue salta de
Ciudad en Ciudad?
()
3
Pronto para hoir , o para echarse
sobre otro ,
y
robarle: en lo que insinua
1os desafo eros a que esti expuesto el sol–
tero. El Eclesiistico habla a los Hebreos,
aconsejandoles el matrimonio , como re–
medio de muchos males en que podian
caer ,
y
asimismo como util al hien pu–
blico
y
particular ; porq1Je todavla no era
llegado aquel tiempo de habl ar de aque–
lla virtud de! Cielo, de la q-ue
J
csu Chrii·
to v:Yio al mundo
a
traer
cl
eJCemplo.
CAPITULO XXXVII.
Quilnes son buenos para dar consejo
,
y
quienes no. El mas fie/ para
darle es el propio corazon de cada uno. F altas de
la
l~ngua
:
cdmo
usa de ella el hombre sahio. El hombre pio se ha de mortificar en
todo aquel/o que puede ser
danOSO
a
SU
anima ;..,)'
particularmente debe
refrenar la gula.
1
Omnis amicus dicet:
Et
ego
amicitiam copulavi : sed
est amicus
solo nomine
ami~
cus.
i
N
onne tri. titia inest us–
que
ad
mortem?
2
Sodalis autem et amicus
ad inimicitiam convertentur.
3
i
0
praesumptio nequissi–
ma
!
i
unde creata es cooped'°e
aridam malitia , et dolositate
•11·
'2
/
I
r
odo amigo a·ira
I:
Yo
tambien
he
trabado amistad con–
tigo: mas hay amigo que
es
ami–
go solo de nombte. iNo
es
este
un,
pesar al par
Cle la
muerte
:i?
2
El compafiero y el amigo
a
enemistad seran tornados
a.
3 :
i
0
invencion detestable!
i
de d6nde saliste para cubrii'
la
tierra de tal malicia,
yde su p,J!r–
fid-ia?
l
lUS •.}
~~
'
Hay muchos que se precian
cjc
ser
ti.elcs amigos de otros ; pero al fin se ve
que
su
amis tad esti solo en los libios.
:a
Otros : Que dura hasta la muerte.
s En
<el
texro Griego va esto unido
To~.
VI.
con lo que precede de esta manera :
~No
es un doforque permanece hasta la muer–
te
,
o
al par de la muerte ,
un compaiiero
y
un amigo que se convierte enemigo?
Ei
muy execrable la doblez
de
tal
hombr~.
Qq 2