..
EL LIBRO DE LA SABIDURIA.
nans de profondo nimio:
8
Per quern omn is natio
transivit qua.e regebatur tua ma–
nu , videntes tua mirabilia et
monstra.
9
Tamquam enim equi de–
paverunt escam , et tamquam
agni exultaverunt , tpagnifican–
tes te, Eomine , qui liberasti
il–
los.
io
Memores enim erant ad–
huc eorum quae in incolatu
il–
lorum facta fuerunt ; quemad–
modum pro natione animalium
eduxit terra muscas , et pro pi–
scibus eructavit fiuvius multi–
tudinem ranarum.
1
r N ovissime " autem vide–
runt novam creaturam avium,
cum adducti concupiscentia po–
stulaverunt escas epulati onis.
12
In allocutione enim desi–
derii
asc~ndit
illis de mari or–
tygometra : et vexationes pec–
catoribus supervenerunt, non si–
ne illis , quae ante facta erant,
argumentis per vim fulminum:
iuste enim patiebantur secun–
dum suas nequitias.
vestido de verde yerba y de flores en Ia
estacion mas apacib le de todo el afio ;
y
en el se alegraron y engra,.decieron al Se–
nor, como los potros y cabritillos que
retozan
y
saltan de contento quando es–
tan paciendo en un frondoso campo.
" Todo el Pueblo de los
Israel~
..
.,llio!!.,...
!i
Otros explican esto de! mana ; pe–
ro p<Jrece mas natural la otra exposicion.
3
""En el pais en donde habian esta–
do como extrangeros
y
desterrados.
4
En cambio de otros animales que
pudiesen ser utiles a los hombres.
5
Codornices muy delicadas
y
de nue–
va especie. Ve,ise el Cap. xvi.
20.
en el
profundo abysmo:
8
Por
el
qual pas6 toda
la
Nacion
1
que era protegida de t u
mano , viendo tus maravillas
y
prodigios.
9
Asi
a manera de caballos
que estan bien pacidos
2
,
y
como
corderos saltaron ellos de ale–
gda , engrandeciendote a
ti ,
Se–
nor ' q ue los li braste.
10
Porque se acordaban
aur1
de aquellas cosas que. acontecie–
ron en la morada de su destierro
3;
como en vez de generacion de a–
nimales
4
crio la tierra
moscas~
y como en vez de peces vomito
el rio muchedumbre de ranas.
1 I
Y despues vieron una nue–
va creacion
s
de aves, quando ven–
cidos de
la
concupiscencia pi–
dieron viandas delicadas.
12
Porque en la habla
6
de su
deseo vinieronles de la mar co–
dornices : mas a los pecadores
7
sobrevinieron quebrantos, no sin
las pruebas que antes habian sido
hechas por la violencia de los ra–
yos
8
:
pues j ustamente _padecian
segun sus maldades.
-
6
A
medida de lo qae desearon
y
pi–
dieron. El Griego
1:ii;
?rapa1.<.1.10£av
,
para
consuelo
y alivio sufo : falta
desiderii.
7
A
los
E gy pcios. Otros lo aplican
a los mismos Hebreos , porque se amo–
tinaron '
y
mirando con has tlo el mana,
pidieron ca rnes. Y del mismo modo todo
lo que se .sigue , confirmfodolo con va–
rios lances
y
suc:esos , como se puede
ver en la exposicion del doll:o BossuET.
Pero entendiendolo de los Egypci\3s, que–
da mas unido
y
natural todo el context()
hasta el fin de! Capfrulo.
s Los Egypcios fueron primero heridos
de los rayos,
y
luego
~ep ultados
ea la mar.
A E:reod. xvr.
13.
Num. x1.
31.
Supr. xvi.
2.