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(

SAN LUCAS.

39 Videte rríanus meas . et

pedes, quía ego ipse sum : pal–

pare et videte , quía spiritus

carnem et ossa non haber, sicut

nie videtis habere.

40

Et • cum' hoc

os

t eis manu

s.

u autem illis non

credentibus, et mirantibus prae

gaudio, dixit : iHabetis hic ali–

quid , quod manducetur?

42

At illi obtulerunt ei paf;.

te

m

piscis assi et fa yum mel–

lis.

43

Et cum manducasse.t

c~ram eis , sumens reliquias ded'ít

eis:

44

Et dixit ad eos : Haec

sunt verba , quae locutus .sum

ad vos , cum adhuc essenc vobi–

~cum

, quoniam necesse est im-

1'

pleri omnia , quae scripta sunt

in Lege Moysi et Prophetis et

Psalmis de me.

45

Tune aperuit illis sen–

~um

ut intelligerent Scriptu–

ras:

39 Ved mis manos y mb

pies, que yo mismo soy : palpad

y ved, que el espíritu no tiene

carne ni huesos., como veis que

yo tengo.

Y

díc~sto.,

mostróles

_ .~ manos~spies

' .

41

Mas como aun no lo aca–

basen de creer, y estuviesen ma–

ravlilados de gozo,díxoles : iTe–

n~quí

alguna cosa de comer

•?

. 4';'.;'

Y

ellos le presentaron par–

te de un pez asado

y

un panal de

miel. ' ·

-

.

4:P Y

habiendo comido de–

'lante de ellos •, tomó las sobras

y

se las dió a ellos :

44 Y

díxoles : Estas

s.on

las

palabras , <¡.ue os hablé , estando

aun con vosotro ', que era nece–

sario cjue se cu 1plíese todo lo

que está escrito ·. mí en la Ley

de Moysés, y en

~s

Prophetas

y

en los Psalmos. '

45

Entónces a ,(:-ióles el senti–

dos para que ent idíesen las

Es..

crituras:

,'·

1

i

Para calmar s turbacion

y

temor

veían ,

s-con 1ldo de sus propios sen_ ..

JCs .. mandó que se acercasen a él , les mos-

tidos

,

e

pe1Csua Jn

que estaban soñando.

tro sus p1es

y

sus manos :

y

para conven-

3

T. Gr.

' 'r~

p.o..

1

r;dÍt~ Y.n~í

11

,

de un pa-

t

c.crlos d<fla verdad que les dec1a hizo que

nn/ de abeja

'

1e

to~asen.

El Sei1or por su Rcsurreccion

4

Comi ,('realmente , no por alguna

dió asu Cuerpo una nueva calidad ,

y

est~cesidad

qL

t

ruviese , sino porque podía

misma se verá en nuestros cuerpos quan-

l1ac~rlo.

S.At

'!UST.Epist.xLTx. Quaest.r.

do resucitemos ; porque lo )ue será pues-

El rayo ardi

',t

1

.te del Sol, afiade el Santo,

toen_ricrra como un cuer .'o todo

anÍI~al,

atrae el <lgua tle la tierra de una :nanera

1:esu~Jt~d: como

un cucrR

1

'

todo espiritual,

muy diferen

(

1

!

de aquel_la, que una tierra

I

·

Gormtli.

X Y.

44· m ·rndo no de subs-

quemada be

1!

esta m1sma :tgua quando

ranc!a , sino de est'<tdo ,condicion por la

cae deshech (m lluvia. Y seria, continúa

glon:~.

que adquirirá. >(HIERON.

Prae-

el mismo S.

.;Jo,

una felicidad imperfefra,

/ at. Lib.

XVIJJ.

in I

t

Tom.

11.

pag.

si

un

cuerp

~~

1

esucitado

no

tuviese

la fa-

457·

,j

culrad de

,;

\

1

er: pero su felicidad seria

11

Par:~.

convcncerl : aun

11

es pidió

tarnbicn

i1

~~éta

si tuviera necesidad..

algo que .comer.

El

exceso

ac

la alegria

de hac.ert

(r•

los

en·~

tan

trastornados

y

tan

fuera de

s

Quirandoles un como velo , que les

' ...._.··

rr.e.í'-.~

lf)

mismo que tocaban

y

impedía ver la luz de Ja verdad que se