CAP'ITULO XIV.
27 "Et
a
qui non baiúlat cru–
cem suam, et venit post me, non
p otest meus esse disci pulus. ·
28 ¿Quís enim ex vobis vo–
leos turrim aedificare·, non príus
sedens computat sumptus ,. qui
necessarii sunt , si habeat ad
perficiendum?
29 N!!! posteaqoam
pos_ye~
rit
fundamentum, et non potue–
rít perficere , orones qui
v¡j.~ent
i ncipiant illudere eí;
30 Dicentes : ¿Quía
hic
ho~
mb coepit aedifita re , et non
potuít consummare?
·
~-...
31 ¿Aut quís Rex íturus com–
mittere bellum adversus alium
Regem , non sedens prius cogi–
tat , si possit cum decem mílli–
bus occu rrere ei , q ui c um vi–
ginti millibus venit ad se?
32 Alioquin adhuc illo lon–
ge agente , legationem mittens, ·
r ogat ea quae pacis sunt.
33 Sic ergo omnis ex vobjs,
qui non renuntiat omnibus quae
possidet , non potest meus esse
d iscipulus.
34 Bonum •
e.stsal. Si au–
tem sal evanuerit, ¿in
qw¡
con~
dietur?
35 Neque in terram, nequé·
in sterquilinium utile est , sed
enemigos , que quieren quh.lrnos la vida
del alma con sus discursos engaiíosos ,
y
con sus perniciosos exemp·los.
"
MS.
No contará prinuro todas las
missioues que lia
y
mester:
2
MS.
Afi"aguar.
3
Por estas dos comparaciones nos
quiere dar a entender J esu Qhristo , que
ánres de empeñarnos en sl ·
le
como
27 Y el que no Jleva su cru,;
a cuestas , y viene en pos de mí,
no puede ser mi discípulo.
28 ¿Porque quién de vosot,ros
queriendo edifiéar una torre, no_
cuenta primero sentado los gas–
tos', que son necesarios, viwo
si tiene para acabarla?
29 No sea que despues que hu–
biere puesto
el
cimiento, y no la
puede. a~abar,
todos
l os
que Jo ve–
a'b comiencen a hacer burla de él,
30 Diciendo : ¿Este hombre
comenzó a ed ificar •, y ho ha po-:
d,)Jo ácabar ?
3r
¿O qué Rey queriendo sa–
lü- a lidiar. c.ontra otro R ey, no
considera á ntes de asiento , si po–
drá salir con diez mil hombres a
hacer R-ente al qÚe viene contra
él
con veinte mil ?
' J
32 D e otra manera.aun quan–
do el otro está léjos , envía su
embaxada pidiéndole la paz.
33 Pues así qualquiera de
vosotros , que no renuncia tO·-)
do lo que posee , no puede ser
mi discípulo
3.
·
34 Buena
ef~a
sal. Mas si la
sal perdiere
su~abor ,
¿con qué
será sazonada.,. ?
35
N o es buena, ni Bara la
tierra, ni para el muladar : maS)
ve~J:laderos
diScípll1os , veamoS
y
toh~
sideremos si hay en nosotrps disposicion
p ara llevar su cru;¡ toda nuestra vida,
y
para renunciar a tod9
lo
que nos
p uede detener
y
servir de impedimen–
to para
conse~·r
la verdadera felici-
dad,
~·
+
M!>~
Con qué cmidrán? ni tien pro
en tierra
,
ni en estiércol.
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Mattk.IC.JS.
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24.
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34·
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.Afattluv.
13.
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49•
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