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CAPITULO V.
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26 Et stupor apprehendit
omnes , et magnificabant Deum.
Et repleti sunt timore, dicentes:
Quía vidirnus mirabrlia hodie.
27 Et • post haec exiit, et
v idit Publicanum nomine Levi,
sedentem ad Telonium, et ait il–
li :
Sequere me.
¡,_
28 Et reliél:is omnibus , sur-
gens secutus est eum.
"
29 Et fecit ei convivium ma–
g num L evi in domo sua :
.:t
erat
turba multa Publicanorum , et
aliorum , qui cum illis erant di-
scumbentes.
<
30 Et • murmurabant Phari–
saei et Scribae eorum , dicentes
ad discipulos eius : ¿Quare cum
P ublicanis et peccatoribus man–
ducatls et bibitis?
31 E t respondens Iesus, di–
xit ad illos : Non egent qui sa–
ni sunt Medico , sed qui male
habent.
32 Non veni vocare iustos,
sed peccatores ad poeniten–
tiarn.
33 At illi dixerunt ad eum:
¿Quare discipuli loannis ieiunant
frequenter , et obsecrationes fa–
ciunt, similiter et Pharisá'eorum:
tui autem edunt et bibuot?
34
Quibus ipse ait: ·¿Num-
26 Y quedaron pasmados,
y
glorificaban a Dios : y penetra–
dos de temor , decían : Vimos
hoy maravillas'.
27 Despues de esto salió,
y
vió a un Publicano llamado
Leví, que estaba sentado al ban-
co,
y
díxole : Sígueme.
,
28 Y levantóse , y dexó to–
das sus cosas,
y
le siguió.
29 E hízole Leví un grande
banquete en su casa
2
,
y asistió
a él un grande número de Publi–
canos,
y
de otros, .que estaban
sentados con ellos a la mesa.
>
30 Mas los Phariséos,y los Es–
cribas de ellos
3
estal¡an murmu–
rando, y decían a los discípulosde ·
Jesus: ¿Por qué comeis
y
bebeis
con lo&Publicanos
y
pecadores?
31 Y respondióles J esus,
y
dixo : Los sanos
J>O
necesitan de
Médico , sino los que están en–
fermos.
32 No vine a llamar los jus–
tos a penitencia , sino los peca:;
dores.
33 Y ellos le dixeron a él:
¿Los·discípulos de Juan por qué
ayunan tanto ,
t
oran ,
y
tám–
bien los de los Phariséos :
y
los
tuyos comen
y
beben 4?
34
A los quales él dixd: ¿Po,¡
~~
5
Este fué
el
comun del pueblo, que
no estaba preocupado contralJesu Chris–
to, ántes le miraba como uno de aquellos
gr:mdes Prophctas que habian aparecido
antiguamente entre sus padres. Pues los
Phariséos no hicieron otro que obstinarse
mas ,
y
enfurecerse contra Jesns.
El
po–
der que manifestó Jesus de perdonar pe–
cados, Ilcnó al pueblo de mayor pasmo.
~
lvlS.
E jizo/grnu )'nntRr en su casa.
3
L os Escribas de dios;'
sto
es ,
de
11
M4tth. IX.
9·
Mnrc.
1
r.
14.
To!ll. I.
los J ud{os
;
o bien Jos Escribas de
aquel
lugar
,
como entienden otros con mas
próbbilidad.
4
En S.
MATHEO
Ix.
8.
se
dice, que
fueron los discípulot de Juan los que
hi–
cieron esta pregunta. Y S. MARcos
n.
:~ S.
que fueron los discípulos de Juan
y
los Phariséos.
E~verisimil
que los de San
Juan se
ju:~taron
a
lo~
Phariséos que
J1a–
blaban con
J
esu Christo ,
y
que todor.
unidos se
la
hiciesen.
/;
Marc. r r .
16.
Rr