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97

" intermision. Si no quieres dejar de orar, no cese tu deseo :

t11

" cont inuo deseo es una voz incesante...

San Agustin sobre el Sal-

1110

37,

exponiendoel verso

1O

que dice: Se1ior, d.olanle de

li

está t.odo

mi

deseo,

y

mi

gemido no está escondidv de tí.

«Siempre ora quien conserrn eu su

cor~zon

eficaz deseo de

»Orar; porque el deseo es oracion...

Bona, Principia ,vilrec/11·istia–

nm,

cap.

44.

!Debe desea rse principalmente la justicia, á . la manera que

»anhela la fuent e el ciervo acosado d,e la ardiente sed, porque

.. esta sed es oracion,

y

de ella pend e nuestra feltcidad. Desear

" continuamente esta justicia, es orar siu iuterrupcion."

Fenclon,

Entrctien s1w la Friere

to mo 3.

0

.. o rar es pedir á Dios que su voluntad se haga; es formar un

,.buen deseo; elevar s11 corazon á Dios; suspirar por los bienes

"que uos promete; gemir á la vista de nuestras miserias

y

de

»los peli gros de ofenderle en que nos hailamos. Para orar de

»este modo , no se necesitan muchas palabras, ni ciencia, ni m(:–

" tod o, ni discurso, ni fatigar la imaginacion: basta un instnu–

»te de tiempo,

y

uu buen mo vimieuto de corazon.

En

ese ins–

»t ante pod emos estar .ocupados en el'ejercicio de nuestras obli–

»gaciones, ofreciendo

ú

Dios lo que hagamos con intencion pu–

,, r¡¡

de glorificarl e, aun en !ns cosas mas comunes;

y

de esta

.. suerte jamás se interrumpirá nuestra oracion. »

Fenclon, ibidcm.

Segun t odos los místicos, este puro

y

ard iente deseo hace

gem ir el cora zon,

y

su ge mido nlcauza indulgencia ni pecador,

co nsuelo

y

for ta leza al justo;

y

por él me reció la Esposa de los

C<rntares, qu e Ja embriagase de amor con dulcísimas caricias su

Divino Esposo. A mas de esto, quie n tiene tan ardiente deseo

de su justificacion

y

adelantamiento espiritual, por lo comun ,

no se distrae en el tiempo que destina especialmente al S!igra–

do ejercicio de la oracion;

y

si padece al gunas distracciones in–

Yoluntarias, no le perjudican

y

aun pueden serle meritorias.

..;xo es inútil Ja oracional que en ella pad ece di:;tr<icciones

upor permision divina, si las disipa prontamen le;

y

Dios estú

"con él, aunque al parecer se Jo ausent:i . Pero mas fú cilmen··

ute pasan las rlistrn cciones despreciándolas, que combatiéndolas;

•porque se fij an mas e n la imaginacion,

y

so n mas molestas,

..cuando es mucbo el empefio en ahuyenta rlas. Tanto mas agra–

udable es

á

nios la oracion árida

y

sin nin gun consuelo, cuan–

«to es mas re pugnante á la natural eza ...

Bona, ibid.

wp.

48.

«Las 11lmn. fi eles no deben te ner escrúpulo de las distraccio–

..nes involuntari as .que les sobreYengan ; po rque ell as contribu–

•ycn

á

perfeccionarlas ma:; que las oraciones sublimes

y

afcc–

H