

RAUL PORRAS BARRENECHEA
-loANNIS DE
~AET.
Antwcrpiaru
.
0
T
.lE
AD
ISSBRTATIONEM
HUGONIS GROTII
J?c Origine GentlumAmcdcanarutn.;
E
T
OBSERVA'fIC>NES
aliquotad m.diorcm in.dagiocm <!ifficillima:
illius
Q_ua:ffioois.
· -
AMSTELODAMI.
1
.Apuc!
L
v
D
o v
1
c v
M EL
z
1
v
1R1
v
M:,
~
I
:>
l
0 C
:!
L II I,
1(:,l-13
Editada en
1643.
La gron obro
de
Hugo Grotius (
1583- 1645)
era
Le de jure belli ac pacis,
publicada en
1625.
Grotius entendfa que la
guerra
podfa ser pacificada, en cierta manero,
humanizada si
se
la Jega/izaba. Su
idea
principal era la superioridad
de/
derecho natural.
Se perfila, en sus postures, el primer presentimiento
de
una Sociedad
de
Naciones, que
nacer6 en el siglo veinte. Muy lefdo en los
medios de
juristas y escol6sticos americanos.
letras en Balta, junto al Tigris
y
por su virtud
y
ciencia llego a
ser Obispo en tres ciudades de
Siria. Murio el ano 664 de la Era
Cristiano , despues de haber
escrito algunos tratados sobre
la Escritura , del que solo ha
quedado su «Comentario del
Parafso». San Efren
y
Bar Cefas
sirven de gufas a Pinelo en su
viaje de exploracion a la selva
oscura de los primeros tiempos.
San Efren sostuvo que el Parafso
82
estaba afuera
y
alrededor del
continente occidental, del otro
lado del Oceano «Y por todas
partes lo cine como a la Luna
un cfrculo»
(1,
118) . El Bar Cefas
(el hijo de Cefas) sostiene que el
Parafso fue tierra diferente de la
occidental en naturaleza
y
en
calidad, que estaba en medio
del mar, rodeada de montes
inaccesibles, en aguas no na–
vegadas por ningun hombre
y que el Oceano primero y el
Parafso despues de este, rodea–
ban como dos cfrculos concen–
tricos el mundo conocido. El
Bar-Cefas agrego -lanzando
la semilla regada por Pinelo
y
anticip6ndose a Ameghino,–
que el hombre fue creado en
aquel continente
y
que en el
vivio hasta el Diluvio. Noe, ul–
timo sobreviviente de aquel
continente se embarco en el
Arca abandonando la tierra
o continente del Parafso
y
fue
a dar a Armenia. El continen–
te occidental -Europa, Asia,
Africa- habfa estado, hasta
entonces, 1652 anos deshabita–
do
y
sin persona humana. Noe
fue pues el Colon de los tiempos
prehistoricos, Colon america–
no que descubre Europa como
San Efren
y
el Bar Cefas resultan,
discfpulos de Platon, presintien–
do la Atl6ntida Americana.
El Parafso es pues para Leon
Pinelo, de conformidad con los
Padres de la Iglesia «un lugar
corporeo, real y verdader0>>.
San Agustin divago cuando
dijo que era tan solo la bea–
titud de la vida con que Dios
creo al hombre. El Parafso fue
tan real
y
verdadero que pue–
de darse sobre el mucha pre–
cision
y
ubicarle f6cilmente en
los mapas
y
hasta medirse en
areas geogr6ficas. Jacques de
Auzoles se anticipo a Pinelo al
lanzar en 1629, en su tratado de
geograffa sacra, dos 16minas
con el piano del Parafso, antes
y
despues del diluvio. Auzoles
senalo con precision envidia–
ble la medida de la region del
Eden
y
del Jardfn de Deleite,
rect6ngulo de veintiseis leguas
de largo
y
quince de ancho
y ubico la puerta occidental
Joyas de la Biblioteca