/
,
D E AS T R
O
NO
M1 A.
párécia que
1
habia menguado notablemente , esto le dió
Fíg:
motivo de inventar la hypótesi siguiente.
Sea
T
el centro de la Tierr~;
C,
el centro de -la
ór-
I
2911
bita
ó
del círculo que se supone ·que anda
un
planeta,
de modo que
TCA
sea . la linea de_ los. ápsides,
y
TC
la
-excentricidad del- planeta. Si suponemos que el centro de
la
órbita en vez de mantenerse
fijo
en
C
trace
la
circunferen-
cia de un circulillo
AGB
,
resultarán dos efectos.
1
°
la
linea de los ~psides
'[
A
mudará de posi~ion ,
y
en vez de
estar constantemente en la direccion
'!'CA,
pasará por
egémplo
á
TG
,
y
formará con· la primera situacion
un
ángulo
ATG.
2
°
la excentricidad en · lugar de ser igual
á
_
TC
llegar·á á ser
TG, TB,
&c. De esta hypótesi s~ valió
Horoccio para representar la segui1da desigualdad de
la
Luna.
8 o o
Es verosimil qué
le ·
sugiriese ésta hypótesi á
}foroccio la observaci? n de los diámetros de la ~una, ~que
podian servir . para dár á éonocer
el
lugar
del apo-
geo ( 7
9
5 ) ; no _pudo menos de ~enfr en conodmkn–
:to
por este camino de que :er. apogeo -de
la ·
Luna se ha–
Haba en
un
lugar_del , delo
2
5
°
mas adelantado quando
la
di'stancia del Sol al -apogeo de la Luna era
de
4
5
°
ó
de
2 2
5'"
0
,
que quando era de
1
3
5
°
y
de
3
í
5
º ;
por
ma–
,~era que
él
movimiento · del apogeo no era uniforme ,
Yi
padecia
un
balance anuo de mas de
1 2
° ;
una
vez cono–
cida
esta
varia-don del apogeo , su enlace con la varia:---–
cion de
la
excentricida~
era facil de
reparar.
Se- -