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Me he dirigido al General Caraballo comunicándole

las

ocurrencias

que

han tenido •lugar aqui, á fin de marchar en el mas perfecto acuerdo, para

el

caso de que el enemigo se presente al Norte del Rio Negro.

Sin mas, le desea felicidad S. S. S. y amigo.

Enrique Castro.

• P. D. En los momentos de cerrar esta, recibo parle del coronel Carabajal

que me dice haber tiroteado á los blancos, en T reinta y Tres, en la mad ruga–

da del dia de hoy, y que estos siguen para

los departamentos de F lorida 6

Minas esperando pelearlos cuando les dé alcance.

e

Exmo. se1ior Ministro de Gobierao.

>

Puntas de los Conven tos, May0 1° de 1870.

• Mi estimado Cándido :

• En este momento

contramarchamos para la costa

del Fraile Muerto, con

la satisfaccion de haber conseguido que nuestros enemigos se hayan visto obli –

gados á salir de este departamento, pues por parte que acaba de recibirse de

Manduca, se sabe que el enemigo pasó al otro lado de Olimar, perseguido por

este jefe y á consecuencia del encuentro que tuvo el 27 con Máximo.

1

Este suceso fué de mucha importancia, no por la pérdida material del

enemigo, sino por la grande desmoralizacion de su fuerza y no menor desban–

de.

P erdieron en este encuen tro al Comandante Saturnino Lopez, un Capitan

J osé Castro, muchos oficiales heridos y diez y siete soldados muertos. Apa–

ricio cargó nuestro flanco izquierdo mandado por Máximo, con su cuadro de

jefes y oficiales venidos con él de E ntre-Rios, alentados en presencia del can·

sancio de los caballos de Máximo y

la mucha fuerza que babia quedado á

retaguardia en la larga persecucion que les babia hecho. Máximo, con ese

valor que le es propio, echó pié á tierra y los hizo dar vuelta cobardemente,

mientras que el centro de la linea compuesto de los infantes que llevaba Olave,

y

el costado derecho

al

mando de Cardoso y Galarza, se llevaban por delante

al enemigo.

• Carabajal se encontraba entonces á legua y media del lugar del combate,

con el arroyo del P arado por medio ; en la noche, que fué tempestuosa, conti·

nuó en persecucion del

enem~go,

lo que ha dado por resultado lo que todos

aspirábamos :- hacerlos salir de este departamento, en el que solo se han po–

dido conservar merced á las sinuosidades del terreno . Manduca quedaba frente

del enemigo, con el rio de Olimar por medio. Trataba de arrebatarles la balsa

con los infantes que llevó del

1•

de Cazadores, en los momentos que marcha–

ban los chasques que han conducido el parte ; si con sus elementos no lo ha

podido tomar, Máximo, que se encontraba á tres leguas, lo ayudará y se con–

seguirá con los infantes que éste lleva.

• Obtenido el alejamiento del

~nemigo

de este departamento, su

der~ota

no

puede ofrecernos ninguna clase de dudas. Nos queda el pesar á los que

componemos la fuerza que tiene el General Castro, de no habar tenido parte