cional Sudamericano, El principio federa–
tivo, Las minorías en Bolivia, El sistema
electoral~ etc~
EDUARDO, ISAAC
(1861- 1924)
Poeta, periodista y autor teatral. Sus ver–
sos, impregnados a veces de una tierna
melancolía, llevan hasta la emoción de la
lágrima. Pero en otros retozan ·el buen hu–
mor y la ironía vivaz, invitando a reír.
Cultivó el teatro, dejándonos una comedia,
Árbol que crece torcido;
un drama,
Entre
el amor
y
el deber,
y un drama patriótico,
Contra el destino.
También ensayó la nove–
la, habiendo publicado
Corazón enfermo.
Sus principales poesías han sido recogidas
en un volumen titulado
HiTJW,os
y
quejas.
Y sus poesías satíricas, en otro:
Pitos
y
flautas.
ESCOBAR!, ISAAC
Siguiendo el ejemplo de Villamil de Ra–
da, el lingüista más grande que hubo en
América, realizó estudios filológicos pro–
fundos, además de ser un orador de pri–
mera fila, cual lo atestigua la misma crí–
tica actual. Está contado éntre los grand·es
aimarólogo3.
Ha escrito diversos ensayos
que evidencian su erudición:
Analogies phi–
lologiques de la langue aimara, Discursos
sobre las lenguas primitivas
y
el Aimara
y
la Filología.
ESQUIVJ:L, JUAN CRISúSTOMO
(1772 - 1816)
En la historia de Bolivia, se le conoce
con el nombre de "Guerrillero de Lareca-
ja", pues en dicha provincia, en compama
de otro famoso patriota, el cura Ildefonso
de la Muñecas, se levantó en armas contra
la dominación española. Nacido en La Paz,
hizo sus estudios universitarios en el Cuz–
co, de donde volvió con el título de aboga–
do y con el espíritu imbuido de ideas re–
volucionarias. Participó en una primera
conspiración juntamente con Murillo, con
un emisario de los patriotas cuzqueños y
otros, el año 1805. Fracasada ésta, Esqui–
ve! se retiró a
Lar~ca
ja, cuyas hr·eñas cons–
tituyeron su último reducto. Él y Muñecas
organizaron una partida de indios, a la que
no pudieron someter las tropas españolas
hasta el 17 de febrero de 1816. Derrotados
l!ls patriotas, Muñ·ecas cayó en manos de
los realistas. Sería asesinado días más tar–
de. Esquivel, en compañía de algunos de
sus hombres, huyó al pueblo de Camata.
Allí fueron rodeados por tropas que llega–
ban por distintas direcciones. Una vez cap–
turados y ejecutados, la cabeza de Esquivel
fué remitida a La Paz para su exhibición
en una picota.
EYZAGUIRRE, FERMfN
(1795- 1859)
Ahogado de destacadísima actuación, fué
presidente de la Corte Suprema de Justicia
durante once años. Estudió en la Universi–
dad de Chuquisaca. Representó a La Paz
en la primera Asamblea (1825), así como
en la Convención del año 1828, en la Cons-
tituyente de 1831 y la Convención de 1851.
Por lealtad al Mariscal Santa Cruz, por
cuyo regreso trabajó intensamente y tomó
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