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misma obra sus numerosos folletos? más de
cien, sobre comercio, agricultura, minería
y demografía bolivianos. Debido a estos
variados estudios y a sus vinculaciones con
todo el mundo, Ballivián fué socio de gran
número de sociedades geográficas e históri–
cas de Europa, América y Asia.
BARRAGÁN, ALEJO Y CIRILO
(1827- 1874)
(. •.. -1865)
Especímenes del periodista independien–
te
y
combativo. Eran, los dos, abogados;
ocuparon diversos cargos ·en la judicatura.
Pero su verdadero campo de acción fué el
periodismo, pudiendo decirse que estos dos
gemelos intelectuales lo iniciaron profesio–
nalmente en Bolivia. Desde la columna dia–
ria lucharon contra las tiranías y, como
consecuencia, sufrieron destierros y perse–
cuciones, hasta que uno de ellos murió en
el exilio y el otro fué sacrificado por la
barbarie en función de gobi·erno. Partici–
paron en diversas conspiraciones en defensa
de las libertades populares, sin jamás bus–
car el medro personal, pues eran sumamen–
te mgullosos. En 1865, Cirilo formó en las
filas revolucionarias que pretendían derri–
bar a Melgarejo; pero a la hora de las
cuentas, se las ajustaron. Después del com–
bate de las Letanías, el déspota ordenó la
captura y el fusilami·ento de Barragán.
Alejo, -que vivía proscrito en Arequipa, mu–
rió allá en 1874.
BARRIOS, CLAUDIO QUINTíN
(1861- 1938)
Prestigió el foro nacional con su inteli–
gencia y su honradez. La universidad túvo-
1o, primero, como uno de sus catedráticos
descollantes y luego como Rector. Dirigió
numerosos diarios y escribió diversos estu–
dios sobre cuestiones constitucionales y có–
digos. Su carrera judicial culminó en la
Corte Suprema de Justicia. Y dentro de la
administración nacional llegó a ocupar los
cargos de ministro de Educación y minis–
tro de Hacienda. Fué diputado en tres pe–
ríodos legislativos. Varias veces, presiden-
te del Concejo Municipal. He aquí algunas
de sus obras:
Constitucionalidad de Boli–
via, Diccionario de la Constitución, Codi–
ficación de la Legislación Militar, Sistemas
Penitenciarios, Compilación de las leyes
del Procedimiento Civil, Antecedentes de la
Revolución Federal,
etc.
BEDREGAL, JUAN FRANOSCO
(1883- 1944)
Profesor, escritor, sociólogo, penalista.
Uno de los escritores más agudos que ha
tenido Bolivia y un "causseur" de humoris–
mo inimitable. Con la circunstancia, no
muy común, de que escribía tan graciosa–
mente como al charlar. Poeta: sus versos
andan desperdigados, pero nadie los olvi-
dó. He ahí su "Tríptico", el más bello poe–
ma para exaltar nuestra bandera: desde
hace 30 años, vibra en los labios de nues–
tras generaciones jóvenes. Prosista: es aquí
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