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plazó al viejo edificio del antiguo Matade–

ro; el mercado secciona! de Sopocachi lle–

na una l)ecesidad muy urgente, ·el mercado

secciona! de Miraflores facilita al vecinda–

rio las adquisiciones diarias, el mercado de

Flores de la plaza Bosque tiene una agra–

dable pres-entación y el mercado secciona!

de la calle Rodríguez, situado en el riñón

de un barrio densamente poblado, cubre un

sector importante de la población.

Parques.

Fué también intensa la obra

en el aspecto de embellecimiento y en prue–

ba de ello figuran entre las obras entrega–

das al s-ervicio público el parque triangular

de Miraflores, hoy denominado "Jornadas

de Julio", en recuerdo de la r·evolución

popular de julio de 1946; el parque Infan–

til NQ

situado en la avenida Zalles, junto

al Vivero Municipal, sitio de recreo que

frecuenta la población, con pas-eos, equipo

·completo de juegos y jardines atractivos

con pabellones y emparrados; el parque

Infantil NQ

de Sopocachi, que brinda es–

parcimiento a los niños de este barrio en

forma halagadora.

Cementerio del Oeste.

Durante esta

administración se hizo la primera amplia–

·ción del Cementerio del Oeste que llegó al

1ímite de su capacidad, la construcción del

Mausoleo de Notables, en que &e inhuman

los restos de preclaros ciudadanos, y se fi–

nanció rec'!usos para construir una nueva

·capilla, en el presupuesto adicional NQ

de 2 de agosto de 1941.

Teléfonos.

Se trabajó el edificio de la

·Central Telefónica de servicio automático,

·concluyendo las gestiones y adquisición de

equipo y aparatos que inició el alcalde se–

ñor Hugo Ernst Rivera. Se concluyó este

·edificio con el aporte de Bs. 3.500.000 del

gobierno nacional. En el acto de inaugura–

ción del servicio a larga distancia, se con–

versó con

~ío

de Janeiro y otras capitales

·sudamericanas.

Desde entonces este servicio ha alcanzá–

·do notable desarrollo.

Plazoleta del Palacio Consistorial.

-ensanche de la calle Mercado, en toda la

extensión del palacio de la comuna y el

templo de San Agustín, hasta la esquina

donde hoy surge

-el

edificio de la Caja de

Ferroviarios, se tuvo que realizar demo–

liendo una antigua casa que formaba una

saliente contigua al mencionado templo.

Para ejecutar estas ampliaciones que me–

joraron ·el ornato en ese sitio tan concurri–

dq, la Alcaldía obtuvo un aporte de los

· bancos Central y Mercantil, cuyos edificios

fueron notablemente mejorados con esta

obra, habiéndose transformado así el con–

junto de tan importante sitio, dando mayor

categoría al palacio consistorial.

Avenidas.

apertura de la avenida

Alto de la Alianza, que une el parque Río–

sinho con la calle lngavi, ofrecía dos ven–

tajas: eliminar algunos focos de desaseo

formados en el riachuelo que fué ·entub!ido,

y unir dos zonas alejadas que hasta enton–

ces no mantuvieron comunicación directa.

En varios años de tesonero esfuerzo se ha

tansformado este lugar y ha surgido allí

una amplia vía pública.

Durante esta administración se han abier–

to las calles Presbítero Medina, Pedro Sa–

lazar, unión entre avenida Manco Capac y

calle Chuquisaca, avenida de circunvala–

ción al Montículo de Sopocachi, calles

Bozo, ampliaciones d·e la calle Yungas, Co–

roico y Uchumayo, además de un conjun–

to de calles en la urbanización de Miraflo–

res que continuó activamente.

Biblioteca Municipal.

En su alcance

cultural y de ornato, esta obra fué proyec–

tada por el alcalde s-eñor Humberto Muñoz

Cornejo, pues para construir el nuevo edifi–

cio se consignó en el presupuesto adicional

NQ 2 de 1941, la suma de Bs. 2.000.000.

En terrenos donados por la Sra. Ana Doro–

tea Jiménez y desafiando críticas de pren–

sa, la Alcaldía inició los trabajos que des-

pués concluyeron los sucesores.

Merece destacarse el entubamiento de

numerosos riachuelos, la adquisición d·e ca–

rros basureros y regadores, la colocación

de fuentes luminosas y los concursos mu–

sicales y literarios, la edición de libros de

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