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Locales de otras confesiones religiosas.
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Como las leyes bolivianas permiten el
libre ejercicio de cultos de las diversas con–
fesiones religiosas, hay ·en la ciudad capi–
lla-s evangélicas, en la avenida
16
de Julio,
en la calle Maximiliano Paredes y otras,
en las que se adoctrina a los parciales, así
como oratorios o locales donde sema"nal–
ment-e se reúnen para entonar cánticos e
himnos característicos de esta religión. Las
asociaciones cristianas se han difundido en
algunos barrios y sostienen escuelas de ten–
dencias populares, inculcando en el públi–
co hábitos morales que tienen innegable
importancia para la convivencia social.
XVII. RÉGIMEN MUNICIPAL
Las Alcaldías desde 1936.
La ciudad
ha alcanzado notable desarrollo con el ré–
gimen de Alcaldías implantado mediante
decreto de
14
de agosto de
1936,
que fué
elevado a la cat-egoría de ley el 2 de di–
ciembre de
1942.
La característica funda–
mental de la reforma consiste en que se ha
creado una función legislativa y fiscaliza–
dora ejercida por el Concejo Deliberante,
que tiene doce concejales, y la función eje–
cutiva que corresponde a la Alcaldía, des–
lindando cuidadosamente sus atribuciones,
a fin de que no se estorben o interfieran.
En los doce años de vigencia de este ré–
gimen comunal la ciudad de La Paz, al
igual de otras del interior del territorio, ha
alcanzado un inusitado desarrollo, progre–
sando en forma no prevista en los cálculos
estadísticos, lo cual ha creado problemas
de todo orden y género que fué indispensa–
ble atender con la urgencia que reclamaba
la opinión, por tratars·e de necesidades sen–
cillamente impostergables.
Un resumen esquemático de las activida·
des y obras públicas municipales empren–
didas por los alcaldes, desde el citado año,
demuestra la consistencia de esta afirma–
ción, como anotamos en seguida:
El primer alcalde, ]osé Tamayo.
El
primer alcalde fué
el
señor José Tamayo,
posesionado en agosto del año
1936.
Le
tocó atender los intereses de esta comuna
en tiempos de transición y cambio. no sólo
de régimen legal sino político, pero echó
algunas bases de la labor futura. Entre las.
obras que mandó ejecutar ninguna alcanzó
la categoría de gran ·envergadura, pero pre–
paró un plan que luego se concretó en las
siguientes administraciones.
Administración
de
Hugo Ernst
Rivera~
El segundo Alcalde de la ciudad, Don
Hugo Ernst Rivera, inició sus labores el
7
de ·enero de
1937,
acometiendo en gran
escala la urbanización de la zona de Mira–
flores que hasta entonces era un extenso
campo de cultivos, conforme a un plano
general concebido . después de minuciosos
estudios, sobre el ordenamiento de líneas,.
niveles, vías troncales, plazas y parques;
plan que actualmente se desenvuelve me–
tódicamente.
Entre las obras públicas más importan–
tes empr·endidas en esta administración se
cuenta el Mercado Secciona! Lanza, el Mer–
cado Camacho, los Comedores Populares,
el traspaso de los hospitales al servicio
nacional dependiente d·el Ministerio de Sa–
lubridad, sin contar los trabajos ordina–
rios o de rutina que atendió en forma in–
tensiva.
La obra del alcalde
D.
Humberto Muñoz–
Cornejo.
En
1938
asumió
la Alcaldía
Don Humberto Muñoz Cornejo, pr·esidente
de los "Amigos de la Ciudad", quien com–
penetrado de las necesidades urbanas más
premiosas, respaldado por su propio pres–
tigio y la versación y autoridad que alcan–
zó, ha realizado un plan general
de
obras
públicas en su doble aspecto: cultura
y
progreso material. Durante esta dinámica
administración, que se prolongó hasta oc–
tubre de
1941,
se ha completado
d
trabajo
de importantes edificios y se iniciaron otros
de gran importancia, entre los que mencio-
namos los siguientes:
·
Mercados.
El anexo al mercado sec–
ciona! Lanza comp1etó la repartición; el
mercado secciona! de Caja del Agua reem-
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