dos, por la competencia que hace a las pu–
blicaciones nacionales la revista extranjera,
principalmente la procedente de Buenos
Aires, no sólo en la presentación gráfica y
literaria sino en el precio, porque las gran–
des editoriales de la capital argentina dejan
sin posibilidades a las empresas nacionales.
De este decaimiento se ha salvado una re–
vista, "Última" que dirig·e don Humberto
Frías, luchando con el medio y la compe–
tencia de fuera.
Bibliot~cas.
Para dar una idea cabal
de la inquietud que existe en la población
por nutrirse de conocimientos mediante la
lectura, es bastante referirse al importante
papel que tiene la Biblioteca Mariscal San–
ta Cruz, antiguo establecimiento por mu–
chos conc·eptos digno de interés, según da–
tos estadísticos recopilados en la dirección.
El nuevo edificio de esta biblioteca s·e le–
vanta en la plaza del Estudiante, sobre las
calles Méjico y Cañada Strongest, a una
cuadra de la Universidad, en un sitio de
donde parten dos avenidas y cuatro calles
que irradian su inquietud y movimiento du–
rante las horas del día. La construcción fu·é
financiada cuando era alcalde de La Paz
don Humberto Muñoz Cornejo, el año 1941,
ciudadano que con clarividente criterio
comprendió que uno de los aspectos salien–
tes de la vida· urbana es proporcionar a
los estudiantes y a la juventud una fuente
de estudio y consulta que favor·ezca las in–
quietudes y escarceos espirituales, creando
una emoción colectiva; pan espiritual que
nutre a las generaciones solidariamente res–
ponsables por el destino superior de una
ciudad.
El terreno que ocupa este moderno edi–
ficio, construído para biblioteca, fué
~onado
a la municipalidad por Doña Ana Dorotea
Jiménez y el arquitecto Mario del Carpio
proyectó los planos y dirigió la obra que
fué concluída y entregada al servicio pú–
blico en 1944. Tiene luz por amplios ven–
tanales y alumbrado de luz indirecta que
hace más cómoda la lectura. La distribu–
ción de las salas y demás compartimientos
en las tres plantas es acertada, porque brin–
da comodidad a las dependencias adminis–
trativas. Cuenta con un salón de conferen–
cias dotado de modernos medios de propa–
ganda. La organización de esta Biblioteca,
en la etapa iniciada con el estreno del nuevo
edificio, fué encomendada a don Raúl Cor–
tázar, director de la Biblioteca de la Facul–
tad de Filosofía de la Universidad de Bue–
nos Aires y don Carlos Víctor Penna, de la
Biblioteca del Estado Mayor General del
Ministerio de Marina, profesor de Bibliote–
cología del Museo Social Argentino, Jefe
del Catálogo Centralizador del Instituto Bi–
bliotecológico de la Universidad de Buenos
Aires; quienes han preparado al personal
en un curso rápido sobre organización y
funcionamiento del servicio. La Cámara
Argentina del Libro hizo una valiosa dona–
ción a la biblioteca municipal, que se expuso
en una inter·esante muestra o Exposición del
Libro Argentino, en los meses de julio y
agosto de 1944, la cual fué muy visitada
por el público y suscitó elogiosos comen–
tarios.
Todos los detalles concernientes a la di–
rección, secretaría, selección del material,
canjes, departamento de entradas, cataloga–
ción y clasificación, depósitos, consultas
y
referencias, encuadernación, trayectoria del
material, normas de trabajo, registros y for–
mularios, ord·enación del material biblio–
gráfico, adiestramiento del personal y otros,
están previstos en el reglamento y en las
instrucciones que los reorganizadores han
formulado, consultando el mejor funciona–
miento de la biblioteca, cuya estructura
puede considerarse por ello muy satisfac–
toria.
El Departamento de Extensión Cultural
auspicia cursos públicos a cargo de cate–
dráticos y conferencistas de 'prestigio, con–
cursos sobre temas de investigación y
cultura, de interés para estudiantes universi–
tarios. Finalmente el Departamento de Co–
ordinación Interbibliotecaria y Bibliográfi–
ca cumple esta tarea metódicamente y la
compilación dd catálogo general, aplica-
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