Table of Contents Table of Contents
Previous Page  121 / 228 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 121 / 228 Next Page
Page Background

-103-

de

ordina~;io,

i

después de ha–

berse cumplido

las

ceremonias,

les dijo que deseaba

probarles

su lealtad.

Los nobles se miraron con–

fusos. sin osar dirijir sus miradas

al Soberano .

Jamás se les ocu–

rno, ni siquiera

pensar, en que

podría existir la palabra desleal–

tad, tocante a la persona divina

del Hijo del Sol De ahí que el

ammo

de todos t}os

noblles se

quedó hoquÍabierto i asistido de

superti•ioso temor.

Por un ,momento 'la sala se

quedó en

t,al silencio, como si

fuera un sepulcro . Luego se oyó

la voz majestuosa

i austera de

Sapan lnka:

-Huáskar lnka: eres el here–

dero

de

T

ahuantinsuyu,

i

de

cuanto mí brazo ha conquistado

para mayor gloria de nuestro Pa–

dre. Por tanto, Kitu te pertene–

ce

i

está sujeto a Kosko, nuestra

ciudad imperial. Pero tienes un

hermano valiente

i magnánimo,

que te ama como a

su_

dueño i

señor: es lnka Atau Hualpa, a

quien mi corazón ama, i por eso

me apena dejarle sin la majes–

t:td i grandeza

que conviene a

su rango de Hijo del Sol.

"Bien sabes que según nues–

tTas leye3, todo Rei o Señor que

se somete a nosotros

i

ama las

glorias de nuestro Padre, queda

como Rei

i

Señor de los suyos,

i

puede

nombrar su

heredero.

Pacha,

1:~.

Reina de Kitu, nos a–

horró sangre

i

rencor, i hacien–

do uso de

e

us derechos, entrega

su Reino a su hijo Atau Hualpa,

qu;en desde· ahora

viene a ser

Reí.

''Se holgaría mi cotazón si

fueses magnánimo que asi

f~

re–

coaocieses,

i para

rodearle. de

majestad, le dejases el

~jétcito

con que cuida

de las fronteras

de nuestro Imperio,

que siendo

tan buen hermano,

i amándote

como te ama,

te servirá como

capitán i soldado;

i

en todo lo

que ordenases,

para aumentar

a

tu Imperio

nuevas

conquitJtas,

para

llevar

nuestra

religión

í

nuestra cultura a los confines de1

mundo.

"Oh, lnti,

~i

así

lo haces,

iré contento

a

desca~.:nar

'en el

seno de nuestro Padre".

Huáskar le contestó con la

mayor facilidad i sencillez:

-Sapan lnka,

Padre mío:

gratísimo es para mí obedecerte

en esto i en cuanto quieras man–

darme. lnka Atau Hualpa here–

de

el

Reino de Kitu,

conforme

a nuestras

cestumbres',

.i

si

es

menester añadit le

otras provia–

ci~.

qu>edo gust-oso

de ello, en

cambio de tu contento,

oh Se–

ñor.

-Eres un verdadero Hijo del

'Sol;- exclamó Huaina Kápac.–

T

u magnanimidad es tan grande,

como la satisfacción

que siento

de veros reinar

a

les dos.

Te

vol;verás, lnka,

a Kosko,

a

go~

bernar nuestro Imperio:

i

todos

vosotros, oh lnkasl

i Capitanes,

continuaréis

amando

a

lnka

Huáskar

como a

heredero de

T ahuantinsuyu;

i reconoc.erets a

lnka Atau Hualpa, como a Rei

de los

kitus

i CaPitán

de las

huestes conC!Juistadoras.

Los nob1es acataron

la

'9'0·

luntad del Monarca, aunque los