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Además,
s~lo
los :nobles
y
los princi:pes de la familia
imperial tenían derecho a la poligamia. Los s
úbditos debían
contentarse con una sola esposa, la cual les
e.raotorgada
por las autoridades, sin que éstas consultaran
gustos ni pre-
, ferencias. Los matrimonios por amor eran, pues, imposd.bles.
La mañana fijada por el inca, todos los quichuas ca–
saderos -aquellos que habían negado al
Ümi~e
del celibato
permitido
y
los enamorados que contaran con las primave–
. ras requeridas- se --reunían en la plaza de su pueblo o aldea.
En la capital, el .soberano se reservaba el privilegio de
COir!·-
. binar
y
decidir las uniones de los príncipes
y
personajes de ·
la corte; sus represen;antes se ocupaban del pueblo: el go–
bernador de la provincia en su residencia
y
los jefes de dis–
trito
y
de tribu en su jurisdicción. El éeremonial era· el mis–
mo en todas partes.
El oficial civil colocaba a . .su gente, por
se~o
y
orden
de edad, en dos filas que se enfrentaban; ·en s1eguida to–
maba el nomb:re de todos e inmediatamente procedía a con–
feccionar la lista de parejas, a capri,cho
y
voluntad. T·er–
minada esta operación, proclamaba las uniones. Después de
esto, cada muchacha iba a reunirse al novio que por orden
legal le haQía caído ·en suerte. Recorriendo luego las filas,
el encargado de casarlos iba juntando las manos de los des-
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posados
y
los invitaba a seUar con un beso su unión para
toda ·la vida.
Los que ha;cían vida en común antes de esta interven–
ción legal del
del~egado
incaico ·eran
severament~e
castiga–
dos; con las manos atadas a la espalda, eran apedreados,
con frecuencia a muerte.
,
De la plaza pública los recién casados se dirigían direc–
tainente al hogar paterno del marido; éste presenta·ba su
compafiera a todos los- parientes
y
l~s
f·estividades se
~ni
ciaban inmediatamente. Durante tres dias enteros, en el
Glan o la tribu, no había sino p!úsica, danzaS-
y
chicha.
Terminada la fiesta, los parientes de la joven par·eja
debían construirles rápidamente una habitaci-ón. Siendo ésta
una tarea común
y
obligatoriá, se terminaba habitualm·ente
en 24 horas. Apenas dispuesto el nido de pajas
y
adobes, los
esposos se dirigían allá, pero cada uno por su lado, llevando
ollas, cueros, jarras, ·todos los utehsilios de su propiedad Y
·el monto del dote.
El
cam,avoc,
o inspector de los bienes ·comunales, se
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