Si ante la aparición del arco
1~1s
se sienten indispues–
tos, creerán anular la nefa1sta influencia desenvolviendo
lentamente entre los dedos un .ovillo de lana de slete ·colo–
res ...
Es
asombrosa la ingenuidad del quichua -en tales cir–
cunstancias; sin ·embargo, el espectro ·solar a través de los
vidrios de una iglesia es considerado benéfico y
pretende~
"recogerlo" a "puñados" de1 s:ue1o
par~a
frotarse con él las
mejillas y la frente.
_
. En cuanto a los ecli-pses ... , éstos· aterrorizan al quichua
de hoy tanto como a los antiguos &úbditos del inca. Cuando
el sol o la luna se velaba, antiguamente, los indios, -persua–
didos de que el astro se hallaba enfermo por fa lta de calor
vital, lo que .podría ocasionar su ·caída, cuyas consecuencias
eran de tem·er, sa.Uan apresuradamente de sus chozas, y,
enc~ndiendo
grandes fogatas, hacían todo el bullicio posi–
ble a fin de mantener despierto al pla.neta afectado, me–
diante coros al son de tambores,
flaut~s,
golpes secos, gritos
estridentes; y aun más: amarrados los perros, se les hacía
aullar a golpes de látigo,
contir~buy·endo
de est·e modo al es-
·trépito· general que había de sac·udir la languidez de1l astro
moribundo.
·
En 1938, a raíz de un eclipse solar, este espectáculo se
repitió en Huanta y en las vecindades: grandes fogatas chis–
porroteaban al son de mil tambores y un ruido endiablado
repercutía devane ·en valle. Por todas pártes se
alza~an
las
súplicas: "¡Mladre luna, no te mueras, que necesitamos de
ti! . . . ¡Dios del cielo, mis·ericordia, ten piedad de nosotros
e
imp~de
que el sol muera y caiga sobre nosotros!"
*
Sus supersticiones también
impli~~n
a animales: el canto
de una le,chuza
ó
·el martiHeo del pájaro ·Carpint·ero les
anuncia una muerte próxima, y los gritos-- del ·chuncho, la–
~lestruc·ción
completa de una aldea. El vuelo de un ha.l·cón
al atardecer, sobre una
~choza
o sobre una
alde~,
es tam–
bién presagio de calam-idades.
· Según su criterio, toda lesión o úlcera proviene- de un
in.se~.cto
que ha lamido álguna parte del cuerpo. Para curarse
inmediatam·ent·e se necesita dar con el insecto y aplastarlo
sobre la llaga: .el milagro será tan rápido como seguro.
Por sobré todo eJStá :el "punuista" (gusano hechi,c-ero),
"'
aJ.
que
re~curren
los serranos ·COn frecuencia. Las madres in-
dígenas suellren ·Colocarlo a la ·Cabec-era d·e la cuna d-e sus
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