- 52 -
lr•nderi algunos autores, y hemos expuesto detalladamentc en la
ctiologia, es probable; pcro en la cnamica no hemos hallado nin–
gun dato al respecto; aserto explicable por la distribuci6n geogr{t–
lica disttnta. .No sucede lo mismo cuando se investiga el bociu
exoftalmico. A este respecto hemos investigado cuidadosamcnL1>
las divers as obras clasicas; y en la de Wiener
y
Lehmann (pa–
gina
fi18
de Wiener
y
laminas
li.2
y
1l3
de Lehmann), antes c1-
tadas, encontramos fotografias de huacos que presenlan la pro·
trusi6n ocular tipica. En cl huaco de la obra de Wiener, su le–
yenda dice: ''Indiens sur le chemins des vallecs chaudes, trouve
d:rns la J'Cgi6n de Puno, 1H·opriete de S . M. l'Empcreur du BresiL''
La protn1sion ocular· es la noia dominanlc en el cuadru
facial, s icndo mas marcada en rl derccho: ri:-prescntando e.I arti ·–
t.a al mismo ticmpo la midriasis, caractcrfstica de la exitaci6n
simpatica. La exoflalmia semeja mucho a la dcscrita en las obras
c·lasicas, con esf: aspecto de "mirada tragica", con gran abertu–
ra de la hendidura palpabral, quc permitc ver regular porci6n de
esclcr6tica (el llamado signo de Stel.lwag).
Al !ado de esta probable existencia de enfcrmedad de Base -·
dow, encontramos una afecci6n ocular bien tipica en un huaco, re–
present.ado en la figura 7. En medio de una expresi6n de sufri–
miento, s e obscrva el ojo derecho ocluido, y carente de la cleva–
ci6n caracLeristica del globo ocular que se encucntra por rJebE·jo'.
En cambio el izquierdo presenta una deformidad circu.hl.r, tumo–
raci6n que ocupar:l y reemplazara c l globo ocular. Corresponde–
ra a un tumor del globo ocular, un probable sarcoma?
Las alLeracioncs estrabica s son raras en la ceramica, a no
ser que radiqueu en la nobleza incaica, la aristocracia
de
lo.-:; orc–
jones . Re pueden constatar estrabismos convergentos o rl1vet"
gentes. srgun que sea tornado uno de los nervios motore ooula–
res. Asi, un "luel"lo '" orej6n. modelado en un cantaro de !a eco–
ca incaira y reprorlucido
P.T1
el libro
elf'
Lehmann ante:; citado, es
bastante caractcristico ( 127 ) .
Ig11nles est1·abismos cambianlr:; , :;e
not.anen ceramica, por·
a!Leracinnrs ocular<'s paralflicas ( del III, IV
y
VI pares). Bello,
aunquc rl'firiendos<' a reprc. entllciones ceramicas de cabezas hu–
rnanas rnomificadas. dice: " ... poro en los varios esperimenes
quo hr visto fln el Museo " Yiclor
Lrirco
He1Tera" , los ojos estan
abierLos
~·
la situaci6n rle las pupilas cambia de uno a otro, hacia
arriba. llacia abajo o laLe1·alizadas, 1·rcordando
JH
cvoluci6n cspas–
m6dica de los globos oculares e n quien padcc<> dolor''.
\ Hello Eduardo . -
J,a Cirugla
clel craneo enLre los anti-
{127)-Walter Lehmann. - Ob.
cit. -
Seccl6n del Cuzco, l&.nuna 78,
va.Uede
Chlcama., cabeza. de un tuerto, barro, cara
y
cuello sin plntar. - Cal.
particular
Gaffron,
Schlacbtersse;
·
Tamblen la misma pleza. en el Libro: "El Cuzco>• de D. F. Eguren
de
L.