Table of Contents Table of Contents
Previous Page  13 / 248 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 13 / 248 Next Page
Page Background

MIS :U:ONTARAS

(lo

de escritor va por mi cuenta), me pongo de pie–

y

me saco el sombrero para saludar

en

Mis

MOJS"TA–

NAS

el advenimiento de los Andes a la literatura pa–

tria.

1Salud

al

Famatina

y

al Aconcagua! iBienvenid<J

sea la musa montaiiesa a hacerse conocer de los por–

teiios, a caer en brazos de su hermana, la de las

Pampa.r, hija de Echeverrla

y

duena unica hasta

ahora del arte naciente en vuestra tierra! 1Qiie jo–

ven, que fresca, que hermosa es esa muchacha q1ie

La Rioja nos envla, un

tatitu

desgrenada, un tanto

salvaje, plet6rica de sangre juvenil, perfumada en

el azahar riojano

y

en

la

flor del aire de la Sierra

V e_lazco

!

/

0

sculo de amor

y

paz sellamos en tu

frente, morocha de nuestras montaiias, desconocida

aun, pero amada

y

presentida largo tiempo!

Como llevado de la mano

y

en tan graciosa com–

paiiia, he recorrido valles, altiplanicies, sel'l:as dan–

tescas, asperas quebradas, cimas

y

abismos': un con–

junto solemne, brm.1fo las

m.as

veces, que pone alas

al espfritu

y

lo empuja al vuelo con tenacidad im–

periosa, gritandole siempre: jmas alto, mas alto,.

hasta las nieves eternas! Pero la majestad andinar

que arrebata los ojos

y

el alma en ascension glo–

riosa

y

doliente, no quita que alla, en un vallecita

oculto, un hilo de agua caiga sin ruido, baiiando

el

peiiasco inmediato, gire envolviendose a un trozo de

marmol, se desvane en hebras lucidas, se reuna

en peqneiio lago

y

repose entre aziicenas como los

cabritillos del Cantar de los Cantares.

Asi, gigantesca

y

ruda, sonriente

y

delicada, es

la naturaleza de los Andes,

'V

asi estci en el libro de

usted. Desde las primeras ·paginas se advierte un

sentimiento religioso, no precisamente mfstico, sin0>