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Decimoquinto. -
Dar a los adverbios ac–
accidentes de los nombres.
Es conocido que los adverbios son partes
invariables de la oraci6n, su papel tmico es
modificar la idea o significaci6n de los verbos.
Su papel merece
~tudio
especial por la flexi–
bilidad que sus modificativos facilitan la rique-
za del lenguaje coma las sufijos.
'
Mas el uso indebido de hacer aumentativo
"
y diminutivo a los adverbios, nos hace tomar
este caso en consideraci6n.
Eje'mplos: Amigo, Placido, .deseo que co–
nozcas la casa, encuentrase ella
cerqu·ta;
por:
Amigo, Placido,
de~eo
que conozca:s la casa;
encuentrase ella cerca
0
muy cerca.
Convidote ir
el
domingo a pasar en el
fundo de San Isidro.-Muchas gracias; leja–
zos esta , por ello me excuso. Por: Muchas gra–
cias ; lejos esta
y
por ello me excuso.
Salgo para Chachapoyas muy de
maiiani–
ta; por: Salgo para Chachapoyas \nuy de ma–
nana.
T
empranito
va el maestro F ructuoso a la
escuela; mientras que
ta11dazo
llega el maes-
tro Eufemiano.
'
T
ardecito
ire donde Lola; por: En la tar-
de ire donde Lola.
'
Decimoaexto. -
Empleo de modos adver-