,
I
- 130 -
'capitán
y
justicia mayor'; lo tTajo,
y
el pobre no
tuvo más remedio qne ceder a 1a injusta
exigen~üt.
En consecuencia, se levantaron
y
firmaron solemnes
actas,
por
la.s
cuales se acordaba : que del Barco que–
daba efectivamente dentro de la gobernación de
Valdivia;
y
que, en nombre de éste, Villagrán en–
tregaba a
Núñez
de
Prado
tan
sólo
la
tenencia. ele
gobernador
de
Tncumán, quedando ,por tanto esta
provincia como una
dependencia
de
Chile.
Unos días después, e1 audaz Vi11a.grán - que se–
gún Groussa.c debió salir a los 11anos tucumanos por
Qolalao y Traneas - continuaba
s:u
viaje
por el
sur,
hacia la cordillera...
,
10.
Despojo
y
destrucción.-.
Mas, al irse, despojó
al gobernador todavía de otros trece soldados, amén
de las 'respectivas cabalgaduras', 'municiones y ví–
veres' ...
Per~
eso no era
to~o
: antes, sus tropas «se
comieron e destruyeron la mayor parte del maíz qti,e
así
~staba
recoxido
e
destruyeron parte\de
las
sernen–
tei~as
que así estaban hechas e lo que no podían .co–
mer lo cortaban algunos con las
espadas...
»
Estas
.
'
-
son palabras de Núñez de Prado
(op.)
pág.
76}. Ta-
les héchos no necesitan comentarios...
11.
Actos sigiiient_es
de ·Núñez
de
P.rado.
-
Arrui–
nado
y
vejado, esperó que Villagrán se alejase,
y
al
mes más o menos, convocó
N
úñez de Prado al Ca·
bildo
y
de acuerdo con él, 'a yoz
de
pregonero' hizo
púbJica .'
reniJ¡nc·ia
del título de Villagrán
y
revalida-