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ie pre hrono el dio del tiempo, in fin in comienzo
y
eterno. hro–
no no nvejece nunca y e hermafrodita · u e pacio no tiene límite .
eina ta bi n la oche, la parte femenina l Chronos. Ambos, Tiemp
ch , moran dentro de una gigante ca cueva, llamada Ohaos
y
onsiderada como matriz uterina). Chao , por con iguiente, e tá lleno de
e perma cósmico, que e mezcla le toda la ubstancias.
epára e de ella , ideada por Chrono., la Luz , así que ll egan a er vi–
ible , a lo lados le su brillo, las demás materia. primas no eparada
aún. La eparación de Luz, amenaza
la
unidad del conjunto; interviene
Chrono
y
busca combinar de nuevo lo contrastes disolventes, mezclán-
lolo
en el gran cráter le la Noche
y
fundiéndolos como en nna olla.
Inquieta
y
no di puesta a combinarse en unidad, fluctúa la materia por
acá, por
allá.;
creando en esta oportunidad infinidad de divinidades. Pero,
al fin, aquella mezcla agitada e cierra cual burbuja en agua
tranquila~
moviéndose en remolino
y
formando un algo redondo. Notando el dio
este estado de cosas forja alrededor de aquél,
y
utilizando la substancia
de la Luz, una cáscara sólida) brillante, dentro la cual tiene capturada
aquella burbuja oviforme. Pero al ser encerrado, ella inspira algo del
aliento de Chronos herrero.
Es.tealiento divino fecunda el huevo cósmi–
co, así que empieza a fermentar y a calentarse hasta parir a Phanes, en–
gendrado por Chronos, sin intención, de la manera descrita.
Abre Phanes, desde adentro, las cerraduras
y
ligas con que Chronos
había asegurado los bordes de las tantas secciones del gran huevo cós–
mico; hace derretir el éter antes inmovible
y
rígido
y
rompe así la pri-
ión : salen los vientos a todas las direcciones; las llamas que suben,
levantan una mitad de la cáscara del huevo hacia arriba donde queda
como cielo; mientras que
la
otra mitad, llenada con los residuos del Uni–
verso : tierra
y
agua, baja
a,
las comarcas de Plutón, el dio8 del mundo
subterráneo
y
de los muertos.
Phane mismo queda un tiempo parado entre cielo
y
tierra, como
principio del amor que a todos une; es
llama.do,por consigujente, Ero .
Pero e_le ocurre - la teogonía órfica no refiere por qué - abandonar,
disgu tado, el mundo
y
trasladar e al espacio snpermundial, donde se
contenta con iluminar y calentar la eternidad antes envuelta en noche
fría, proce o que fné consjderado como copulación de Pha.nes con Noch .
Sólo una parte d l brillo de Phane reflejada por el éter, baja en forma
de luz solar a nue tra
ti~rra .
Para jluminar la noche terrestre, Phanes
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