El Padre Melchior Pereira,
vor
lo que ata·
ñía a
San Luis de Paute,
expresó: <Las len·
guas que tienen es la
Oañar,
que es la suya
propia,
y
la
geinentl
del Inca, que toda la saben.>
Don Gaspa
r
Gallegos, por lo
referente
a
San F1·ancisco de Peleusi o Pueleusi del Azogue,
dijo: <Lfámase la lengna de estos naturales
Ca–
fí,are,
porque así se !.Jama toda esta provincia
y
términos de la ciudad de Onenca.»
<s:Y
a es–
ta causa f:!e
llamaron et.itoe naturales <le
los tér–
minos de Cuenca,
Cañares,
y
así hablan la di·
cha lengua de
los
Cañares
entre ellos
y
la con–
versan; pero todo's sabeu
y
hablan
la lengua
del Inga general,
y
entre nosotros
y
otras gen–
tes t.ratan
y
conversan con la di0ha lengn-a.>
Dou Ma1·tín Gaviria, por
lo
que bacía a
Santo Domingo de Ohunohi,
expuso: «Hablan la
lengua geu ral
Q,uiohua
del Iuga:
los más
1
la
lengua particula
de ellos, que es la
Oañar
de
la provinciá de Cuenca,
y
en partes rnvuelta
con
la de Jos
Pu1'guays
de la provincia de Rio–
bamba. Hay otras diferentes lenguas en estos
mismos indios, mas por estas dos lenguas se en·
tienden
todos.»
En fin, Don Hernando
Italiano, por lo
to–
cante a
Alausí,
expresó: «Hablan la lengua
ge~
neral del Ingua que llaman
Quihuoha;
los
más
hablan Ja
lengua particular de ellos, que es la
Oañar
de la provincia de Cuenca, mezclada con
la de Los
Puruayes
de la provincia de Riobam–
ba;
y
hay
otras difenmtes lenguas. mas por
t>S·
tas dos se entienden rn
uy
bieu.>
Hasta aquí
e$OS
señores Curas Doctrineros.
Un año desvués
que
ello~,
esto
es,
en
1583,
el Sínodo reunido en Quito por el 11 us–
trísimo Don
Fr.
Luis López Solís, dió un tet:1·
timonio irrecusable de la coexistencia del
Que·
chua
y
del
Oañari,
al mandar "que
se
com·