LAS TERMAS DE REYES
.Tu.iuy como todas las provincias mon–
tañosas del país, tiene también sus ver–
tientes de aguas medicinales.
A poca distancia de la confluencia del
arroyo Guerr·ero, cerca de las nacientes
del Río de Reyes, están las termas de este
mismo nombre, cuyas aguas medicinales,
al decir de los entendidos, "son las de ma–
yor virtud curativa de la República".
Durante muchos años, este hermoso-rin–
cón de nuestro s uelo, rodeado de lomas
llenas de vegetación y de cerros orlados
de peñascos de diversos colores, que ciñen
como gigantescas diademas, era solo con–
currido por algunos cuantos jujeños que,
en los días de fiesta de cierta época del
año, realizaban el incómodo y largo via–
je en coches de alquiler, saliendo de la ciu–
dad por la mañana para estar de vuelta