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CE SVRA DE LA ELOQVENCIA 85
La amplitud con que extracta y comenta
Fernández avarrete Ja dedicatoria del mal–
humorado eijas y Lobera, reproducida,
por más sefias, en la BiMiot. Hi'sp.- Chil.
de Medina (11, 356-57), nos dispensa de mo–
lestar á nuestros lectores con la copia de
tan desmadejado como, en algunas cláusu–
las, inicuo y destempladísimo documento.
En cambio, no podemos omitir la noticia
de que á las pocas semanas ó, tal vez, solos
días de hecha en París la 3.ª edición del
Theatro Naval, daba cuenta de lla el nú·
mero del joumal des r;avans, pertene–
ciente al 9 de Junio de 1704, en los térmi–
nos siguientes: Ce Livre fut imprimé a
Madrid pour la premiere fois, l'an 16 . '
quelque temps apres on vit paroitre un
autre sous le titre d 'Eclaircisseme1~t die
Thealre naval de D om Fra11cisco de eyxas.
Ce nouvel Ouvrage fut porté a notre Auteur
en 1698. a Lima Capitale du Perou, & il
n'en dit pas icy beaucoup de bien non plus
que du P ere Petrei Jesuite a qni il l'attii–
bue....» (xxxn, 56--66).
Puédese asegurar, sin miedo á levantarJes
ningún falso testimonio, que sus redactores
ignoraban cuál fuese el verdadero título del
« nouvel Ouvrage» á que se referían; lo
mismo que Backer (11, 1918) y Sommervo–
gel (vr, 631)1 cuando, prescindiendo de si es
anónimo ó seudónimo, ó publicado á su
nombre, y fundados no más que en el dicho
del :Jo1erual, atribuyen al P. Petrei, como
cosa ciertamente suya, un « Eclaircisse.
ment, etc., sur le Theatro naval de Fr. de
Seyxas y Lovera».
Pero les cierto, en efecto, que lo sea? Ya
vimos que así lo afirmaba Seijas, autor de
la especie ya vulgar entre los que se precian
de eruditos. Mas, á pesar de eso, el no hallar
mencionada tal obra en el Suppl. Scrij>t.
Prov. To/et., ni en el de Alcázar, tan dili–
gente en sus investigaciones bibliográfica ,
y, lo que es muy de notar, compafiero y
amigo íntimo del P. Petrei, nos fouza á
sospechar que el bueno de Seijas y Lobera
anduvo algo exagerado, cuando menos, en
su dedicatoria.
Lo que pudo haber sucedido en este ne–
gocio es que el Capitán D. Pedro de Cas–
tro, muy práctico en mate.ria de flujos y
reflujos del mar como «Maestre de navíos
del contrabando de negros de la carrera de
las Indias», noticioso de que el P. Petrei
tenla escritos algunos apuntes en que ~e
corregian no pocos yerros de Seijas y Lo–
bera, le indicara lo agradecido que le que–
daría de que se sirviera mostrárselos para
una obra que traía entre manos contra
el presuntuoso autor del T/1en/ro Jltaval
Hy drogrnpht'co, y que, con eguidos los di–
chos apuntes, los utilizara á todo su pla–
cer.- Pudo hacer sucedido también, por
otro camino, que D. Pedro de Castro, dis–
puesto el plan, ó terminado ya, si se qu)err,
lo substancial de las Causas ejicie11tcs, se lo
ensefiara al P. Petrei con el fin de que lo
corrigiera y afiadiera conforme á su gusto
y voluntad, y que éste se aprovechara de
ocasión tan favorable para la inserción de
los discursos y reparos que tan denodada–
mente había rechazado ijas y Lobera.
En todo caso, parece que no se puede
negar, ni es nue tro án imo negarlo, que en
las Causas hay algo, y tal vez mucho, pro–
pio del P. Petrei, mas no tanto, se nos
figura, que, por ello, se las hayamos de
atribuir á él, arrebatándoselas al Capitán
D. Pedro, á cuyo nombre se imprimieron.
3828. - Censvra de Ja Eloqvencia,
para calificar svs Obras, y señalada–
mente las del Pvlpito. Dalo a la estampa
el Doctor Don Gonzalo Perez Ledesma,
Canonigo Dignidad de la Santa Iglesia
de Leon. Al Señor Conde
de Oropesa, &c. Virei de Valencia, &c.
Con Licencia. En Zarago1;a: En el Hos–
pital Real, y General de nuestra Señora
de Gracia. Año M. DC. XL. VIIf. A costa
de Matias de Lizau, Mercader de Libros.
-En 4.º, de 128 ps., s. 6 hs. p. n.
EL P. Jo É DE ORMAZA.
Nicolás Antonio, que primero había
dicho que «D. G11No1 AJ.\'US Prnrrz DE
LEDES~tA Legionensi ecclesi~ canonicus,
edidit : Ce11 ttra de la eloq11c11cin para cnli-