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RELACION HISTORICA
di Gandia, Marchese di Lombay, Caual–
lerizzo maggiore, &c., poi Religioso della
Compagnia di Giesu, e suo Terzo Prepo–
sito Generale, Scritta da! Padre Scipione
Sgambata della medesima Compagnia.
E hora ristampato con l'Aggiunta de'
Miracoli cavati da Processi autentici
della sua Canonizatione. In Roma, per
il
Varese, 1671.-En 12.
0 ,
de 253 ps., s. las
hs. p.n.
E . EL P. ALONSO DE ALARCOS.
Que firma la dedicatoria en la Casa Pro–
fesa de Roma, á 15 de Julio de 1671, como
~Procuratore
della Canonizzazione», según
advierte Sommervogel (r, 117; vu, II72).
3649.-Relacion Historica del Viage
a la America Meridional hecho de orden
de S. Mag. para medir algunos grados
de_Meridiano Terrestre, y venir por
ell~s
en conocimiento de la verdadera Figura,
y Magnitud de la Tierra, con otras va–
rias -Observaciones Astronomicas, y Phy–
sicas: Por Don Jorge Juan, Comendador
de Aliaga, en el Orden de San Juan, So–
cio correspondiente de la Real Acade–
mia de las Ciencias de Parls, y DonAn–
tonio de Ulloa, de la Real Sociedad de
Londres: ambos Capitanes de Fragata
de la Real Armada. [Primera Parte,
Tomo Primero- Primera Parte, Tomo
Segundo- Segunda Parte, Tomo Ter–
cero -
Segunda Parte, Tomo Quarto].
lmpressa de orden del Rey Nuestro Se–
ñor En Madrid Por Antonio Marin, Año .
de M. DCC. XLVHL-Cuatro tomos en
dos volúmenes en 4.
0
,
de ps. 682 (s. 14
hs. p. n ., con 36 láms.), 603-cxcv (s. 8
hs. p. n., con 14 láms.).
E. EL P. ANDRÉS MARCOS BURRIEL
(?).
Con ocasión de que en vatios capítulos
de esta obra se hacen-grandes elogios de la
Compañía de Jesús y de sus misioneros en
América, escribe así el editor de la «
Colec–
Ú01l
general de Documentos....-.,
descrita al
núm. 3379 : «Procuraron [los Jesuitas] en
h Relacion de la
América Meridional
de
D. Antonio U/loa
desfigurar las cosas á su
modo. El P.
Andres Marcos Burriel
fue el
verdadero autor de lo tocante á los
jesui-–
tas,
y de otro modo estos no habrian per–
mitido imprimir la obra, en lo demas digna
de aplauso. Todo el mundo sabe el honor
y
amor á la Patria y á la verdad de
D. Anto–
nio de Ulloa .
¿Pero qué hombre instruido
ignora, que apoyado del P.
F1·ancisco Ra–
bago
se entrometió el P .
Burriel
á inter–
calar este
y
otros capítulos?» (t. r, págs.
xLrx-L).Aunque estas palabras, dictadas más
por la pasión que por la critica, no merecen
de suyo otra respuesta que la del ridículo
ó el desprecio, cúmplenos, sin embargo,
para satisfacción de los escrupulosos, decir
algo del supuesto en que pudiera, tal vez,
fundarlas el maligno editor.
'
Es indudable que el P. Burriel vió el
manuscrito de la
Relacion Histon'ca
por
encargo del Marqués de la Ensenada, y que
el año de 1747 escri-bió en su defensa una
larguísifna Disertación que poco después
paraba en manos de D. Luis José Velázquez
de Velasco, como lo afirman terminante–
mente Hervás ( r, 28)
y
Caballero (Mss.,
núm. 469).- También se tiene por cierto
que es del P. Burriel el «Prologo que pre–
cede á la Relacion....-., según el mismo Ve–
lázquez de Velasco
(Noticia del Viage de
Esj>a~ía,
págs. 1r-2), á quien siguen Sem–
pere y Guarinos (r, 244) , Hervás (r, 26,
v; 27, v.), Magan
(Semanarioj>iutor: esj>añ.,
3-' ser.: n, 59), Backer (r, 962), Sommervogel
(n, 404), etc.; y tampoco nos parece in–
creíble que, ó el mismo P. Burriel, ó D.
An–
tonio de Ulloa por su insinuación
y
consejo,
hiciese algunas correcciones en la obra toda,
antes de imprimirla, cuando es público
y
notorio que el manuscrito original había
suscitado algunas dificultades
y
contiendas
harto serias, en que tuvo que intervenir con
su prudencia, autoridad
y
erudición el pa·
cífico Religioso.
Pero que éste, apoyado justamente por el