-
312 -
El reino de los cielos se
Jancw paclw111an ringa-
alcanza á. viva fuerza, y los
pac sinthiyanami, paila
que se la hacen
á
sí mis-
l11taicangapac quiquínpac
mos son los que lo arreba-
shungula atinami
t.
Jesu–
tan
1.
Si alguno quiere venir
cristota cati hac, Paihuan
en pos de Jesucristo
y
tener
janac pachapi tiyashac nic–
parte en su gloria, debe
ca sa inami, paipac ci·uxta
renunciar e
tí.
sí mi mo y
puncha pundzapi apari–
llevar su cruz cada día
2 •
nami2. .Allí causaingapac
Para vivir, pues, cristiana-
llaquinamí , mutsunatac–
mente hay que llevar
mi. .A hun supaica, Díos–
trabajos y padecimiento .
ta allí cristianor·1mata–
Ademá , el demonio en su
pish millaniní. Gltairairn
odio
{L
Dios y
tí.
los justos,
llulla pachata mana alli- 1
provoca al mundo, es decir,
cunata atican allicunrüa ca-
>Í.
los malvados
tí.
que per-
tijaf'haichic ltuaTtucltiiehfr-
igau aun de muerte
;í.
los
pi h nishpa. Iluauquipi
Ti
buenos. T ambién por pro-
ltuauquita, yaya clturita,
pia malicia aborrece, per-
clmri yayatc¿, mana al/i–
sigue
y
aun mata el her-
cuna alli cristianocunata
mano al hermano, el padrn
allí causashccimanta Dio.<–
al hijo, el hijo al padre;
pac camachicu ltr.a ·ltimita
en fin
lo malvados per.:
lmacaichislwamanta ehir¡ui-
igaen
:í.
los j ustos porque
cu hpa tsiuii11, anyan,
Ntr
-son icrvo fieles de Dio :
tijacltan
ltuw1ucftiitp1'.~/i
¡
todo esto ha predicho Je-u-
caitaca Jesucristo Ttaupalla
non reccdit.
nde octava beatitudo 1uodammodo ad scp-
tem prreccdentes pertinet."
t
Mntth. 11, 12.
2
J_,uc. 9, 23.