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D. MANUEL .AM.A.T Y JUNIENT.
enseñanza de las matemáticas, dispusó el Virey que
se diese
á'
los cursantes el sueldo de cadetes;, mas
no obstante las sábias lecciones del profesor.; que lo:
era D. Cosme Bueno, la clase fué poco frecuentada:
desde luégo. Cediendo á las preocupaciones todavía.
dominantes, se prohibió matricular
y
conferir gra–
dos á los mestizos, negros, zambos
y
mulatos.
Los establecimientos de benefi,cencia recibieron
recurso~
duraderos por la aplicacion de valiosas tem–
poralidades ,
y
mereció especial proteccion el asilo–
fundado por D. Diego Ladron de
Guevar~,
para re-·
coger
y
ocupar útilmente á los mendigos.
El Virey buscó tambien recursos á la beneficen–
cia pública en las peleas de gallos
y
corridas de to–
ros, los dos entretenimientos en que el p1ieblo gas–
taba su dinero con más gusto. Para el primero se
construyó por empresa particular una casa, ce–
diendo de las entradas, en beneficio comun. 1.00(}
pesos al año por el término fijado al arrendamiento,.
y
la obra entera, una vez terminado el
contrato ~
D. Agustín Landaburu pactó
y
llevó
á
cabo la cons–
truccion de la plaza de toros, que ántes era de ma–
dera, dándole solidez
y
grandes proporciones, bajo
la condicion de que anuahp.ente entregaría al hos–
picio de pobre
1.500
pesos. descontaria
1.000
·por el
capital invertido,
y
su fondo quedaría perdido ,.
luégo que ese descuento hubiese cubierto sus anti–
cipaciones. La multitud, que acorria con entu–
siasmo
á
las peligrosas corridas," tuvo el -placer de