LXIII
El testimonio del P. Carvajal alegado por Cieza
no parece evidente para desmentir á Gutiérrez,
pues nacla más natural que dicho fraile, pasadas
ya las guerras .civiles, quisiese disculpar el des–
aéato cometido contra el Virrey, diciendo- que ha ..
. bía sido enviado por la Audiencia con aquella co–
misión.
Los motivos que tuvo el Oidor Juan Alvarez
para dar libertad al Virrey son distintos en Cieza y
en Gutiérrez.
Este dice que.Alvarez temió la venganza de Blas–
co Núñez Vela, y que ofreció á éste soltarlo de la
prisión (
1);
aqu~l
afirma que antes
me~iaron
· tratos
en que anduvo el Licenciado Rodrigo Niño, y que
el Virrey tomó en ellos la iniciativa:
~ Como
se dixese de la venida del Li éenciado
Aluarez, el Visorrey creyo que venia a matarlo con
yeruas, y ansi lo qixo a Diego Aluarez de Cueto, el
qual hablo con el Visorrey para que procurase ne–
gociar con el licenciaGlo Rodrigo Niño el alcalde
que los miraua, qrie lo dexase saltar en tierra para
poder
hablar
con e Licenciado Aluarez antes que se
viese con el; y
pare~iendole
bien ·al Visorrey, lo rro •
go a Rodrigo Niño y fue dello éontento, y ansi salto
en tierra Diego Aluarez de Cueto, e ya era llegado
(I )
Quinqumarios¡
libro II, cap. IV.