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siesse hazer mal en aquel tomulto que andaua en
la cibdad. Hechas estas cosas, el Oydor <;epeda,
estando un dia delante de ciertos amigos suyos y
de sus panyaguados, juro a Dios
y
a Sancta Maria
su madre que si el Visorrey lo quisiesse embarcar
por fuen;a, de no dexarse prender, aunque para
ello le costase mili vidas que tuuie'Sse, porque lo
.auia ya tomado por punto de honrra. El Oydor
Alison de Tejada se ciscaua de miedo del
\1_
isorrey,
·p.orque siempre le vía muy enojado y furioso todas
las vezes que le yua a uer_, y ·el Visorrey, conos–
dendo del
es.to,le dio seys arcabuzeros para que
le guardassen la persona
y)a
vida,
y
dende a vn
rato le embio a dezir que no se rezelasse de sus
enemi.g·os, si alguno,s tenia, ni de ning·una otra
-cosa, que para es$O le embiaua los arcabuzeros –
para que le deffendiessen de todo mal
y
peligro,
y
-embioselos a
}ir1
para que le guardassen, porque
no se
huy~sse,
para embarcallo despues. Al Oydor
-<;epeda embio otros tantos arcabuzeros a fin de
que le guardassen, porque no se ausentasse; ca
tenia pensado de lo embarcar primero a el que
-otro alguno, porque se le mostraua muy claro ene- .
mjgo en todo
y
por todo. Mas el Oydor <;epeda
los conuertio .en su opinion
y
los tuuo muy regala–
dos en aquel espacio de tiempo que uvo aunque
les dio a entender que no entendía a lo que auian
venido, sino que era para otro respecto. El Oydor
Pedro Ortiz de <;arate le pesaua en e tremo por–
que tambien le querían embarcar, estando, como
estaua, enfermo cotidianamente en la cama, que
no sabia lo que se auia de hazer, y como era viejo