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las franquezas, libertades. priuileg·ios, ynmunida–
des, exempciones y mercedes que de Su Magestad
teni~n,
como a conquistadores de la tierra. Y de–
mas desto dezian que si la tierra no estuuiera con_-
.
-
quistada a costa dellos, que nunea el Rey les qui-
tara co:;a alguna, ni gozaráde nada, porquenose–
uviera lleuado, como se lleuó, tanta riqueza de –
oro y plata y esmeraldas, y que nunca en España
se hinchiera de tan grandes riquezas como se
auian uisto en la Casa de la Contratacion. Con es–
tas dos cedulas y con otras mercedes que ellos de–
zian tener, pensauan de exemirse de lo que Su Ma–
gestad mandaua, por lo qual se abroquelauan va–
lientemente con ellas para deffenderse del Viso–
rrey y de lós quatro Oydores, ó de otra qualquiera
persona que a la tierra viniera con la misma de–
manda. Otros dixeron publicamente y sin ninguna
yerg·uen<;a, como hombres mal yntencionados y
sediciosos, que las mejores leyes que auia en la
tierra eran las armas
i
aFCabuzes
_Y
cauallos, y
que los dineros que se auian de embiar a Su Ma–
gestad se diessen a los soldados que auia en la
tierra, por
qu~nto
si el Visorrey Blasco Nuñez
Vela y los quatro Oydores no les quisiessen admi–
tir ninguna suplicacion, ni quisiessen hazer cosa
buena que fqesse en pro y vtilidad para ellos, que
entonces llamarían a los soldados que
andaua~v~gamundos por toda lE- tierra, que con fabor y ayu-
~
da def os fos desterrarían y hecharian fuera della
aunque les pesasse. Estas brauosidades, con otros
desatinos, se dexauan dezir estos inconsiderados
y brauoneles hombres, contra Su Magestad y con-