Capítulo VJI.
visto al visorey, respondió quedar cerca .de Trujillo
y que venia quitando indios; y en Sant Miguel que ya
estaban sin ellos el teniente Palomino y otras personas;
y aún, que decia que en to as p
r t
s habia de hacer lo
mismo, no dejando afuera á los oficiales de la real ha–
cienda. Y diciendo esto
R
uilo ba, se par
ti ,.
á da aviso á
Vaca de Castro.
El
factor lllan X uárez, cansado del ca–
mino y enojado con
1
s nuevas, se recostó sobre un pi-
. lar del aposento, no pudiendo fácilmente
oir.loque de–
cian, y
el
capitan Diego de Agüero á grandes voces
dijo:-Yo no quiero parar hasta encontrar coh el
vi~o
rey, y si me ha de quitar los indios, quítemelos lu "go
que á mi hijo no le ha de faltar de comer, pues tiene
hacienda con que vivirá. Y diciendo esto, se partió
luego para Trujillo
(a).
Con
él
fué Rodri go Núñ z, ve–
cino de Guánuco, que tambi n estaba
mal
con aca de
Castro, por le haber quitado los indios de repartimien–
to,
por haber seguido á don Diego de Almagro el
Mozo.
Ya hicimos mencion como
el
visorey había partido
de la cibdad de Sant Miguel acompañado de algunos
vecinos y de otros soldados, dando oido, á lo que dicen,
cuando le decian algun mal de Vaca de Castro, porque
desde que entró en Perú, se allegó á Ja parte de los
Almagros, y ellos, sin refrenarse, hablaban lo que que–
rian del mismo Vaca de Castro.-Ya tengo otras veces
dicho, cómo el antiguo no.robre de Sant Miguel es Piú-
(a)
Herrcr cntei;
i"
e. t e pasaje al revés.
(Dtc.
VII, lib. VIT, capí–
tulo
XVf. )